El hombre, en estado de embriaguez, decidió dormirse entre dos raíles y no pudo ser avistado a tiempo por el conductor de la línea Keiyo. A pesar de que el maquinista activó los frenos de emergencia, el hombre resultó arrollado por el tren.
No obstante, la víctima fue hallada ilesa, y todavía dormida, bajo la máquina. Los investigadores entienden que consiguió salir con vida porque había espacio suficiente entre el tren y él. El hombre se ha limitado a declarar que se cayó accidentalmente a la vía, según informa el 'Mainichi Daily News'.