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Un punto negro de 11 millones de euros

La costosa reforma de Colón, que ha devuelto la estatua del descubridor al centro de la plaza, se ha convertido en una trampa para el tráfico. El atasco tras las vacaciones puede ser antológico. 

namutoni dijo el día 31 de Diciembre de 2009 a las 17:16:

Lo único malo de haber dejado de vivir en Madrid es que no puedo votar contra Gallardón. ¡Ah! ¡No había caido! Tampoco puedo votar a favor de Esperanza Aguirre...

baudilio dijo el día 31 de Diciembre de 2009 a las 08:12:

Heimdall , sobre lo que dices al final:

"Si después de esto, hay una mayoría de madrileños que apoya a Gallardón en su gestión municipal, es que estamos todos locos ......"

También he pensado yo, pero ¿qué alternativa hay? ¿Has oído a la oposición municipal hacer oposición? Es más, le reprochan no haber cumplido con la reforma del Prado. Es como tener que optar entre Malaguín y Malagón. Y si tiras tu voto a las carpas del Retiro, como hago yo, la cosa queda entre una batalla entre hooligans pepero-gallardonitas y hooligans socialistas, y como creo que en Madrid hay más de los primeros, no hay que dudar que repetirá.

Harley11 dijo el día 31 de Diciembre de 2009 a las 07:53:

Albertito, majete, habla con tu suegro Utrera Molina y con la familia de Cobo y asegurate sus votos porque te veo mal pero mal-mal. Y aunque parezca mentira y después de más de una década, el Pesebre va a volver al Ayuntamiento a poco que presenten a un candidato medio-potente. Te lo tienes bien merecido.

albertri dijo el día 30 de Diciembre de 2009 a las 23:19:

El otro día pasé por ahí eran las 9:00 de la noche y me tuve que desviar por Serrano que a pesar de las obras no tenia atasco.
Resumiendo mucho ese punto va a ser infernal, dantesco y cuando haya lluvia en plena hora punta se batirán records de atascos.

Jnoville dijo el día 30 de Diciembre de 2009 a las 22:15:

Puede que lo que intente sea que las manifestaciones que no le gustan no tengan ese escenario.

Heimdall dijo el día 30 de Diciembre de 2009 a las 20:06:

Baudilio, has dado en el clavo:
La modificación en la Plaza de Colón se enmarca en una operación de amplio calado encaminada a destrozar literalmente el tráfico rodado en la capital. El objetivo no es otro que obligar a los usuarios de vehículo propio a utilizar el transporte público a base de impedir el tránsito normal en la ciudad; de esta forma, Gallardón intenta ganarse definitivamente a esa parte de electorado de izquierdas que, según su estimación, le votaría en unas hipotéticas elecciónes generales en las que él fuera el líder del PP. El resultado final de todo el proceso promete ser dantesco: una ciudad de más de 3.000.000 millones de habitantes convertida, por la demencial gestión de este sujeto, en una insólita ratonera en la que solamente la casta política podrá disfrutar de sus privilegios mientras que el resto de mortales deberá sufrir las incomidades, lentitud y altos costes del transporte público para continuar con su vida normal.
Si después de esto, hay una mayoría de madrileños que apoya a Gallardón en su gestión municipal, es que estamos todos locos ...

grilin dijo el día 30 de Diciembre de 2009 a las 19:22:

Ya le conocemos al impresentable este a gastar a gastar como no es suyo el dinero ni aguanta atascos a los demas que nos den por culo.
Yo le haria pagarlo de su bolsillo y sino embargarle su casa. Y soy madrileño nacido y viviendo y ex afiliado al PP esto ya no es lo que era

baudilio dijo el día 30 de Diciembre de 2009 a las 19:05:

Percibo en el artículo un aire de sorpresa, como si el autor hubiese descubierto un fallo de previsión en la "remodelación" cuyo resultado es el estrangulamiento del eje Castellana-Recoletos que implica el estrangulamiento de Madrid. No hay tal fallo, sino la continuación de la política del alcaldón desde que llegó al cargo, consistente en la estrangulación del tráfico. No hay calle "remodelada" en la que la "remodelación" no haya consistido en eliminar al menos un carril de la calzada y decenas o centenas de plazas de aparcamiento. El que tenga coche y viva en esa calle que se lo suba a casa. Y ojo, porque lo que pretende hacer en El Prado es, aparte de destrozarlo estéticamente, estrangular aun más el tráfico rodado.

Curiosamente, hace años, todos los alcaldes al comenzar su mandato hacían promesas de arreglar el tráfico. Ya parecía que entraba en la fórmula del juramento. A los cien días como la cosa estaba igual, las secciones de local de TODOS los periódicos le ponían a parir. Ahora este anuncia que lo va a poner peor y todo el periodismo madrileño callado.

Y como no faltará quien venga con la milonga del transporte público (como el bicicletero del artículo), les diré que me gustaría ver que un día todo el mundo dejase el coche en casa y lo usase. El colapso iba a ser de los que hacen época y no más de un treinta por ciento de la población llegaría al trabajo a su hora.