L D (EFE) Uno de los tres jóvenes que quería llevar a cabo un suicidio colectivo en una casa rural de Zamora, se quería suicidar porque le "aburría la vida" y porque estaba "cansado", según una grabación de Telecinco. En "El programa de Ana Rosa", cuya dirección inició el pasado mes de octubre una investigación sobre los suicidios colectivos, Cristina, nombre ficticio de una de las periodistas infiltradas, explicó detalles de lo ocurrido. Cristina relató que desde el pasado año "decidimos hacer un seguimiento sobre este tema en la red y tras varios meses nos dimos cuenta que iban en serio" y añadió que "fueron super recelosos hasta que cogieron confianza".
En una de las grabaciones, uno de ellos afirma que no tiene una razón concreta para querer suicidarse y asegura que está cansado y que "me aburre la vida". Además uno de los detenidos propone a las periodistas que se suiciden "esposados por si alguna persona se arrepiente y evitar que se salga" y le plantea métodos para llevarlo a cabo. El chico también afirma que "la casa es perfecta para nuestros planes". Cristina insistió en que uno de los detenidos, natural de Oviedo, "era muy normal" y "hasta lo que sabemos no tenían dramas personales .
El ingreso en distintos centros se debe a la recomendación de los profesionales de la medicina, que consideraron inadecuado que los tres acusados permanecieran en el mismo centro para evitar que mantengan contacto y se reafirmen en su pacto para quitarse la vida conjuntamente.
Durante el fin de semana, los jóvenes, de entre 26 y 29 años, han permanecido en los centros hospitalarios únicamente con el personal de guardia. En la jornada de este lunes, una vez que se incorpore el equipo habitual que atiende el área de Psiquiatría de los centros hospitalarios en los que están ingresados, se procederá a realizar las primeras pruebas diagnósticas para el informe encargado por el juzgado.
Desde un foro de Internet
De los tres jóvenes, todos ellos con estudios universitarios, uno mostró ante el juez su arrepentimiento por el intento de quitarse la vida, mientras que los otros dos se reafirmaron en su idea de suicidarse juntos.
Los tres detenidos, dos de ellos naturales de Madrid y el otro de Oviedo, contactaron a través de un foro de Internet desde el que pactaron quitarse la vida de forma colectiva, para lo que alquilaron una casa rural en Lober de Aliste, un pueblo zamorano de 63 habitantes. Cuando fueron detenidos por la Policía Nacional en la casa rural, tenían preparado carbón, una paellera y un medidor de monóxido de carbono que presuntamente pretendían utilizar para conseguir su objetivo.