Mientras Arabia Saudí, Qatar y Turquía sigan financiando el yihadismo, los esfuerzos por ahormar una oposición prooccidental a la dictadura de Asad fracasará.
De manera incomprensible, la muerte de Fidel no sólo no concita una opinión unánime de rechazo a un sátrapa siniestro, sino que tenemos que escuchar muchas palabras de alabanza de su figura y su trayectoria.
En 1959, en fin, el número estimado de prostitutas en La Habana era de 11.500. Hoy, por simple pudor, ninguna instancia oficial quiere repetir el cálculo.