Allá donde una mentalidad socialista apuesta por el igualitarismo empobrecedor, el liberalismo subraya la riqueza de la competencia de diversos modelos.
Pocas veces han coincidido en el tiempo dos escenas tan reveladoras de un abismo moral. El que separa a las víctimas de la tiranía de los amigos de los verdugos.
¿Cuándo veremos a la Fiscalía actuar contra ETB o TV3 con el mismo ímpetu que contra el autobús de Hazte Oir? Cuando Mariano actúe contra la Generalidad golpista de Cataluña. O sea, uno de estos siglos.
Sin Javier Fernández y sin Albert Rivera, lo único que le queda al PP es el refugio de una angosta trinchera de 137 escaños donde resistir todo lo que pueda.