La evasión fiscal no es un delito contra la naturaleza humana ni contra la sociedad. Es un delito sin víctimas determinadas, y creado por la legislación.
Asesinar sí podían hacerlo en Andalucía, Extremadura, Castilla o el Levante. Pero las penas tienen que cumplirlas en cárceles del País Vasco. Todo muy lógico.