Cabe que Sánchez no quiera realmente ir a nuevas elecciones, porque una cosa es lo que Tezanos nos dice y otra muy diferente lo que le dice a su señorito.
Si un lobby marroquí estuviera financiando a la izquierda ecologista para acabar con los trasvases en España y llevar la producción agrícola a los predios del sultán, no podría estar saliéndole mejor.
Sánchez no tiene ningún problema con ponerle a su Gobierno el broche de izquierdas. Lo único que no quiere es un Gobierno con dirigentes de Podemos 'dentro'.