Manuel Gavira (Manolo para sus conocidos) es el nuevo hombre fuerte de Vox en Andalucía y podría terminar siendo el candidato del partido a la presidencia de la Junta, aunque ni él ni la dirección nacional confirman todavía este extremo. "Yo estoy a disposición del partido y de Santiago Abascal", asegura en conversación con Libertad Digital.
Gavira sustituye en el cargo a Alejandro Hernández, que ha liderado a la formación en esta comunidad desde la polémica salida del exjuez Francisco Serrano. Hernández ha permitido con su trabajo dar estabilidad al gobierno de PP y Cs presidido por Juanma Moreno pero, de cara a una posible convocatoria electoral, su "excesiva" cercanía al PP, como aseguran algunas voces dentro del partido, habría motivado que la dirección nacional haya decidido sustituirle.
"Ha hecho una gran labor estos años pero las negociaciones con el PP pueden acabar mimetizándote con un partido que es muy absorbente", aseguran algunos miembros de Vox. Gavira prefiere mantenerse al margen y dice de su compañero que "le tiene un gran aprecio y respeto". "Ha hecho una gran labor", destaca.
El entorno de Hernández confirma que la decisión de Vox le pilló por sorpresa y supuso para él una decepción, aunque se mantiene fiel al partido. Según ha podido saber Libertad Digital, la dirección nacional mantuvo una reunión con él en Sevilla para trasladarle que se iba a producir su sustitución por Gavira.
Vox necesita marcar perfil propio
Aunque oficialmente faltan algo menos de dos años para las próximas elecciones andaluzas, Vox lleva tiempo pidiendo un adelanto de los comicios ante la desconfianza que genera Cs después de la moción de censura en Murcia. Los estatutos autonómicos de Andalucía impiden convocar elecciones en julio y agosto por lo que se descarta un adelanto hasta, al menos, después del verano.
Haya o no elecciones en breve, Vox ya prepara el terreno para marcar perfil propio y alejarse del PP después de haber sostenido su gobierno durante más de dos años, habiendo aprobado tres presupuestos autonómicos y numerosas iniciativas.
La batalla contra Canal Sur
En las negociaciones presupuestarias estuvo presente Gavira, que logró sacar adelante un recorte de la financiación para Canal Sur, una de sus principales batallas políticas. "Puso en un brete a Elías Bendodo" (consejero de presidencia del gobierno andaluz), según aseguran desde el partido.
El nuevo portavoz de Vox es partidario de cerrar la cadena autonómica pero es consciente de que eso requiere una amplia mayoría parlamentaria por lo que, de momento, reclama que se reduzca el gasto que ocasiona a las arcas públicas eliminando, por ejemplo, las producciones externas, que asumirían los 1.400 trabajadores que la cadena pública andaluza tiene contratados en plantilla.
Gavira es miembro de la Mesa del Parlamento andaluz (fue el primer cargo institucional que logró Vox en toda España), portavoz del partido en la Comisión de Turismo, portavoz en la de RTVA y presidió la Comisión de Reconstrucción económica y social, a pesar de que Vox votó en contra de su creación.
Fueron precisamente sus intervenciones en esta última comisión las que llamaron la atención del partido a nivel nacional por su determinación, su soltura y su contundencia a la hora de transmitir el mensaje de Vox, mostrándose muy combativo con el PSOE y Adelante Andalucía, pero también con el PP y Cs, a los que reprocha haber mantenido muchas de las políticas de los anteriores gobiernos socialistas.
Gavira se afilió a Vox desde el principio, en 2014. Un año después fue como número tres por Cádiz en las listas del partido al Parlamento andaluz y, después, como número uno por esta provincia a las del Congreso en las elecciones generales de 2015 y 2016.
De apodo, "Úrsula"
En las andaluzas de 2018, cuando Vox logró 12 diputados, consiguió entrar en el Parlamento andaluz como número uno por Cádiz, provincia en la que nació en 1969. Abogado de profesión, casado y con dos hijos de 21 y 16 años, tuvo que cerrar su bufete de abogados cuando obtuvo el escaño por ser incompatible con el cargo.
Sus compañeros dicen de él que es un hombre "muy preparado" y "muy trabajador". Incluso le han puesto el apodo de "Úrsula", monja de la que se dice que su espíritu vaga por el Parlamento andaluz, cuyo edificio albergó el Hospital de las Cinco Llagas. "Llega el primero y se va el último, siempre está en el Parlamento andaluz, por eso le llamamos Úrsula", aseguran sus amigos.
Su portavoz adjunto, Rodrigo Alonso, presidente del sindicato de Vox, Solidaridad, le define como "un hombre extraordinario" y destaca de él que es una persona que "se prepara mucho todos los temas" y conoce a la perfección los entresijos de la Cámara andaluza como miembro de la Mesa.
Uno de los principales objetivos de Gavira será intentar consolidar y ampliar la base de Vox en Andalucía en un momento en el que las encuestas son muy favorables al PP en este territorio, fundamental para los de Abascal por ser uno de sus principales caladeros de votos y haber supuesto la puerta de entrada para su despegue a nivel nacional.
Si, como se prevé, Cs es absorbido por los ‘populares’, el papel de Vox será determinante para impedir que la izquierda vuelva a gobernar en esta comunidad, como ha ocurrido en las elecciones de Madrid.