El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha celebrado sus tres años en el palacio de San Telmo con una encuesta en la que se afirma que el PP se quedaría muy cerca de la mayoría absoluta si las elecciones previstas para finales de este año se celebraran en este momento. Moreno, sin embargo, tendría que contar con un Vox aún sin candidato oficial a la presidencia andaluza para garantizarse la reelección pese a que el partido de Santiago Abascal ya le ha avisado de que quizá no pueda contar con ellos.
En este sondeo de Sigma Dos para el diario El Mundo se afirma que Juanma Moreno podría tener entre 48 y 49 escaños quedándose a seis diputados para la mayoría absoluta. Con la abstención de Vox, que crecería 2,6 puntos con respecto a los comicios de 2018, Moreno podría mantenerse como presidente andaluz ya que la suma de toda la izquierda es de 43 diputados. La situación que demuestra esta encuesta es muy parecida a la que arrojaba el último Barómetro Andaluz ya que el PP casi duplicaría lo obtenido en las últimas elecciones y conseguiría el 36,9% de los votos.
Con estos resultados, Andalucía se mantendría gobernada por el centroderecha. Ciudadanos sobreviviría pese a que en el batacazo del partido de Juan Marín se dejaría 12 puntos y pasaría de los 21 diputados actuales a entre 3 y 4. Con estos resultados Cs podría volver a apoyar al PP pero ya no tendría el peso que actualmente tiene en el Gobierno regional.
El PP sí que podría tener unas condiciones mucho más favorables a la hora de conformar o un gobierno monocolor al estilo del de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid o reeditar el presente con Ciudadanos pero con menos poder de los de Marín. También podría evitar la entrada de Vox en el Ejecutivo manteniéndolo como socio estratégico como estaba hasta mediados de 2021.
Esta encuesta refuerza el papel de Vox como tercera fuerza en la región y destaca que el PP ganaría por primera vez en todas las provincias. En Almería, donde celebró el último Consejo de Gobierno, Juanma Moreno estaría cerca de duplicar en porcentaje al PSOE obteniendo un 43,9% de los votos. También ganaría en Sevilla, un bastión socialista, con un breve margen y empatando a votos. Los apoyos a Ciudadanos estarían en Cádiz, Málaga, Sevilla y, quizá, en Granada.
La izquierda no suma
Una región que ha estado tantas décadas bajo gobiernos socialistas y donde la izquierda mantuvo el gobierno después de que apareciera dos de los mayores casos de corrupción de la historia de España, los ERE fraudulentos y los cursos de formación, ahora no sumaría ni para conseguir más votos que Juanma Moreno en solitario.
El PSOE de Juan Espadas se quedaría a 10 puntos del líder del PP y con un 26,7% de los votos y unos escaños estimados en 32 o 33, exalcalde de Sevilla repetiría los resultados de su antecesora en el liderazgo del socialismo andaluz, la expresidenta de la Junta, Susana Díaz.
Espadas, además, no podría contar con el resto de partidos de la izquierda en Andalucía para intentar arrebatarle el poder al centroderecha. La división de la extrema izquierda andaluza arroja hasta tres partidos distintos: Adelante Andalucía, Unidas Podemos por Andalucía y la más reciente, Andaluces Levantaos.
De las tres coaliciones Podemos conseguiría 7 u 8 diputados y el partido de Teresa Rodríguez, Adelante Andalucía obtendría dos. Por su parte, la coalición que incluye al partido de Íñigo Errejón en la región, Andaluces Levantaos, no tendría representación parlamentaria.