El desenlace de la polémica sobe el empadronamiento de Macarena Olona, con la ratificación de su candidatura por parte de la Junta Electoral de Granada, no sólo permite a Vox respirar aliviado, sino que da munición al partido en una campaña que, sin haber dado comienzo todavía oficialmente, ya se percibe como muy convulsa.
Ante la repercusión que está teniendo lo que denominan como "bulo del empadronamiento", el partido encargó "de urgencia" un tracking electoral el pasado fin de semana para medir hasta qué punto estaba influyendo este asunto en la intención de voto, según confirman fuentes de Vox. Para su sorpresa, constataron que en estos días han llegado a crecer hasta dos puntos, aunque no desvelan en qué porcentaje se sitúan en estos momentos.
La mayoría de los sondeos encargados por los medios de comunicación a las empresas demoscópicas recogen que Vox rondaba antes de la polémica los 20 escaños y en torno a un 17% de apoyos, siendo imprescindible en todos los casos para que el PP de Juanma Moreno pueda retener el gobierno de la Junta de Andalucía, a pesar de sus aspiraciones de lograr la mayoría absoluta o sumar más que toda la izquierda junta, situación esta última que no evitaría tener que pactar con los de Abascal.
Todos contra Vox
A pesar de que la polémica les ha permitido crecer electoralmente, Vox rechaza que les haya "beneficiado" ya que el foco se centra únicamente en la cuestión del empadronamiento de Olona, lo que les impide trasladar sus propuestas para consolidar el voto. De hecho, la candidata ha presentado denuncia contra la alcaldesa por prevaricación y delito electoral. Se trata, en cualquier caso, de un crecimiento que podría desinflarse según avancen los días, cuando el interés público y mediático decaiga.
El portavoz parlamentario de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ironizaba el pasado fin de semana en twitter sobre la existencia de un "complot para que Vox gane las elecciones andaluzas", enumerando lo hechos insólitos que están marcando este arranque de precampaña, como fue que Podemos no se inscribiera a tiempo para integrarse en la coalición de izquierdas, que el PP llamara "Estado plurinacional" a España y que el PSOE haya "disparado el protagonismo de Macarena Olona inventando una burda trampa".
El partido no descarta que la campaña se convierta en un "todos contra Vox" del que también participe el PP, coincidiendo de esa forma con la izquierda a la hora de atacarles, lo que les facilitaría poder presentarse como la verdadera alternativa en Andalucía.
Recuerda, por ejemplo, que algunas propuestas para celebrar los debates electorales han excluido a Macarena Olona del enfrentamiento con Juanma Moreno o han sustituido al candidato del PP por otro miembro del partido para evitar el cara a cara entre ambos, lo que para la formación de Abascal es fruto del "miedo" que tienen los populares, y en concreto de Juanma Moreno, a medirse con su candidata.