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Martín Higueras

Inalcanzables Red Bull; ¡Por fin Vettel!

En general este gran premio no ha estado mal, no tan emocionante como el de hace una semana, pero lo que es cierto es que sin Ferrari y McLaren arriba, las cosas se hacen mucho más fáciles para Red Bull y mucho más aburridas para los aficionados.

Lo que está claro después de este GP de Malasia es que el momento de los Red Bull es impresionante. Sus dos pilotos han sido los más constantes -se repartieron las vueltas rápidas- seguramente gracias a una buena estrategia considerando que Vettel y Webber partían desde los tres primeros en la parrilla de salida. Esto, sumado a que sus principales rivales como Ferrari o McLaren estaban muy retrasados al principio, permitió que Christian Horner diseñara una carrera bastante tranquila para así lograr un perfecto 1-2 para el equipo.

Es evidente también que las clasificaciones del sábado determinaron lo que ocurriría en carrera. Los Red Bull se vieron muy beneficiados por los problemas de los demás para redondear una carrera bastante plácida. Pero confieso que a partir de ahí hay un elemento que se me escapa. No entiendo aún la estrategia de Ferrari. Sus dos pilotos partieron con neumáticos duros pero Massa entró a cambiarlos por los blandos en la vuelta 25 mientras que Alonso no lo hizo hasta la 36, es decir 11 vueltas después. Esto permitió que el brasileño, que estaba delante del español con una ventaja de un segundo más o menos, aumentara la diferencia a casi 12 segundos. Algo inexplicable sobre todo cuando fue bastante claro que con el segundo par de neumáticos, los Ferrari eran muy rápidos, incluso más que los Red Bull en algunos momentos. De haber calcado la estrategia de Massa, Alonso hubiera podido pasarlo ya sea en boxes o en pista, algo que no logró en el primer stint de la carrera. Eso sí, a menos que una de las causas de este demora fuera el problema en el embrague que sufrió desde el principio. Quizá es por eso que su partida no fue buena ya que esta vez no tuvo el problema de Australia cuando se retrasó con la pista mojada. Sin embargo, su segundo stint en Malasia fue muy bueno hasta que se encontró con el claro tapón de Button al que intentó adelantar claramente en dos oportunidades hasta que el motor dijo basta en la última vuelta.

Al que le sucedió algo parecido al final de carrera fue a Hamilton. El inglés, que partió por detrás de Alonso, fue sin duda el más rápido en buena parte del gran premio. Literalmente voló con su McLaren y en sólo 4 vueltas ya había ganado 9 posiciones. Y por si fuera poco, su entrada a boxes fue increíblemente rápida y los mecánicos de McLaren lograron cambiar sus neumáticos en sólo 3,5 segundos. Todo eso era perfecto, hasta que alcanzó a un increíble Adrian Sutil que aguantó brillantemente durante muchas vueltas los ataques de Hamilton, en lo que fue un auténtica batalla de motores Mercedes. Sin duda, el mérito fue del alemán aunque también está claro que el británico sigue siendo uno de los más veloces y arriesgados de la parrilla.

Mención aparte merece el otro español que pudo participar en la carrera ya que De la Rosa tuvo que quedarse en su paddock pese a salir con su BMW Sauber a la vuelta de formación. Jaime Alguersuari ha dejado claro, una vez más, que está hecho para este deporte con movimientos inteligentes durante la carrera. Fue muy competitivo durante las 56 vueltas y su victoriosa batalla contra Hulkenberg fue clara prueba de eso. Gracias a su constancia logró sumar dos brillantes puntos, los primeros en su joven carrera en la Fórmula Uno a los que seguramente seguirán muchos más, lo que le confirmará como uno de los pilotos con más futuro en la categoría.

Cabe destacar también el gran momento de Nico Rosberg que logró un sensacional tercer lugar, ganando por tercera vez consecutiva su particular duelo con Michael Schumacher que se vio obligado a abandonar por un problema en el tren trasero de su Mercedes. Por su parte, los que siguen sorprendiendo son los Renault. Petrov no estuvo mal este domingo pero el que sigue convenciendo es Kubica con un increíble cuarto lugar que se suma al impresionante segundo puesto de Australia. Todos sabíamos de su potencial pero pocos creíamos en el buen momento de la escudería francesa.

No sé realmente qué hubiera sucedido de haber hecho acto de presencia la lluvia durante la carrera. La verdad es que casi mejor correr en Malasia en seco ya que cuando llueve todo se convierte en un caos, más o menos como lo que vimos en la Q1 del sábado. Me sigue sin gustar los horarios (sobre todo por el madrugón en este lado del planeta, ahora mismo escribo y son las 5am) y buena prueba de eso fue el gran premio del año pasado, convertido en un auténtico infierno y que se vio recortado por la falta de luz. En general este gran premio no ha estado mal, no tan emocionante como el de hace una semana, pero lo que es cierto es que sin Ferrari y McLaren arriba, las cosas se hacen mucho más fáciles para Red Bull y mucho más aburridas para los aficionados a este deporte aunque a veces nos dan espectáculo desde atrás. Ojalá que en China veamos una auténtica batalla en los primeros lugares.

* Puede comentar esta columna en el blog "Arráncalo, por Dios!"

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