Ayudar económicamente a los bares de los pequeños pueblos de Castilla y León es una medida que atiende a los desafíos demográficos de esta Comunidad, al tiempo que persigue el bienestar comunitario, el mantenimiento de las relaciones sociales y la convivencia en los pequeños núcleos rurales.
Es por ello, que la Junta de Castilla y León ha presentado este viernes la nueva línea de ayudas que aporta un elemento positivo para la permanencia de los ciudadanos en el entorno rural: los bares, cafeterías y otros establecimientos similares son centros de ocio y de relajación para los habitantes del pueblo, pero también son centros de acogida al visitante y de bienvenida al nuevo poblador. El plazo de solicitudes para esta subvención estará abierto desde este 21 de julio hasta el 15 de julio.
Por otro lado, esta es una iniciativa positiva desde el punto de vista social, ya que dichos establecimientos son un lugar de encuentro de los vecinos de estas pequeñas localidades, donde hombres, mujeres y niños comparten su tiempo en todo tipo de actividades lúdicas, de ocio o culturales.
También es beneficiosa desde el plano asistencial y para mantener el bienestar de las personas, dado que la existencia de un bar en un pueblo pequeño ayuda a evitar la soledad no deseada y la desintegración social, e incluso permite detectar situaciones de problemas de salud, vulnerabilidad o desamparo. Por último, no se puede obviar que también es una medida enfocada a generar empleo y actividad económica, contribuyendo, así, a dinamizar la economía local.
Pueblos "con vida durante todo el año"
El consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago ha presentado estas nuevas ayudas precisamente en uno de estos bares, en la pequeña pedanía de La Santa Espina, del municipio de Castromonte (Valladolid), que por sus características podría ser una de las entidades locales beneficiarias de la subvención. Esta iniciativa fue uno de los compromisos del Gobierno autonómico para esta legislatura, ya anunciado por el titular de la Presidencia en las Cortes de Castilla y León.
El consejero ha expresado su deseo de que "nuestros pequeños pueblos estén bien acondicionados para el día a día de los vecinos, esto es, que tengan buenas infraestructuras y servicios públicos de calidad, pero también que sean habitables, humanos, sociales… en definitiva, que tengan vida durante todo el año".
La cuantía que consigna inicialmente la Consejería de la Presidencia a esta nueva línea de ayudas es de algo más de tres millones de euros. No obstante, está previsto que dicha cuantía pueda verse ampliada para dar respuesta al máximo número posible de peticiones.
Podrán solicitar esta ayuda los pueblos de hasta los 200 habitantes, ya sean municipios o pedanías. En todo caso, los pueblos con menos de 100 habitantes serán los primeros a los que se tenga en cuenta para el reparto, continuando con los de menos de 200 habitantes hasta conseguir atender a todas las solicitudes que permita el límite presupuestario.
El número de municipios castellanos y leoneses que entran en estos márgenes de población, es decir, que tienen menos de 200 habitantes, es de 1.265, lo cual representa a más del 56% de los 2.248 municipios de Castilla y León. En cuanto a las pedanías, hay 1.996 con menos de 200 habitantes, más del 90% de las 2.208 que existen en la Comunidad.
De entre estas entidades locales, las que tengan menos de 100 habitantes tendrán prioridad a la hora de recibir la ayuda. En Castilla y León hay 719 municipios y 1.761 pedanías que tienen menos de este número de habitantes. En total, por tanto, existen en la Comunidad 3.261 entidades locales con menos de 200 habitantes (más de un 73% de todas las entidades locales castellanas y leonesas), de las cuales 2.480 cuentan con menos de 100 habitantes.
Solicitudes
Los establecimientos que recibirán la ayuda podrán ser tanto públicos como privados. En todo caso, la presentación de la solicitud tendrá que ser realizada por el Ayuntamiento del municipio, que deberá cumplir un requisito más allá del límite de población. Con el objetivo de no interferir en la libertad de mercado, el municipio o la pedanía solicitante deberá tener solo un bar.
En el caso de las pedanías, solo cuenta para este requisito el número de este tipo de centros dentro de la propia pedanía, y no los que se encuentren en el municipio al que pertenecen. En ambos supuestos, tienen la obligación de abrir un mínimo de cinco días a la semana y de cinco horas al día, salvo durante el mes de vacaciones.
Los 3.000 euros de la subvención deberán dedicarse a cubrir gastos de suministros generales, como agua, luz, gas y otros combustibles para calefacción y agua caliente, y también podrán destinarse al pago de internet, televisión o plataformas audiovisuales. La subvención será percibida en última instancia por la entidad pública (municipio o pedanía) o por la empresa privada que haya corrido con los gastos, que han de haberse producido en el último año antes de esta convocatoria.