Bajo el lema "estrena lo nuevo", El Corte Inglés está empezando a cambiar de estrategia, pues la cuestión reside en renovarse. Es ahora, por tanto, cuando deciden que las etiquetas también empiezan a tachar algunos ceros en ciertas ocasiones. Aunque no tenemos claro aún el porcentaje exacto.
Hasta hace pocos años a El Corte Inglés no le ha sido del todo fácil conectar con el público más adicto a la moda, que prefiere comprar mucho gastando poco. Pero el problema reside en que ese público –el más joven que no ha conocido los años gloriosos del grupo de grandes almanenes- no conoce realmente lo que El Corte Inglés ofrece.
¿Por qué? Primero, porque la ubicación de la planta de moda de El Corte Inglés no está a pie de calle. Aunque suene a algo irrelevante, una de las razones principales del éxito de Zara se debe a estar situada en las principales avenidas de cada ciudad.
La planta de moda del grupo de grandes almacenes, liderado por Isidoro Álvearez, siempre ha estado ubicada entre la tercera y la cuarta planta –por no hablar de que la ‘moda joven’ estaba una planta aun más arriba -, y para que los jóvenes accedieran a dicha planta se precisaba de conocimiento y paciencia; digo conocimiento pues las nuevas generaciones desconocen que hay moda también 'ahí arriba'.
El segundo punto reside en la relación, casi inseparable, que conciben ciertos estratos de España entre la empresa presidida por Isidoro Álvarez y la idea del conservadurismo. Cuando entras en cualquier establecimiento de El Corte Inglés, solo con un vistazo lo primero que se aprecia es la sección de perfumería y cosmética, la de bolsos, y, sobre todo, los ‘corners’ de firmas de lujo. Así, cualquiera que no quiera gastarse más de 100 euros, va a salir de inmediato ‘pitando leches’, como dicen. Lo cual, en suma, ha implicado que en el imaginario social colectivo de los españoles se asocie la empresa a campos semánticos como "conservadurismo" -tan poco de ‘moda’, ¿verdad? sobre todo para los acostumbrados a ver a Wyoming o Gran Hermano-, a lo "caro" y a lo "elitista"; cuando, en verdad, solo hay que abrir la mente un poco.
El tercer y último punto se debe a que remolinos como Zara, Mango y algunos otros grandes grupos textiles han terminado con las últimas bocanadas de aire fresco del textil de El Corte Inglés. Se olvidan, sin embargo, de que un jersey de ‘Easy Wear’ propiedad de El Corte Inglés puede costar lo mismo, o incluso menos, que uno de Zara.