La hiperpigmentación es uno de los problemas estéticos que más preocupan a los hombres y las mujeres. Y es que las manchas aparecen por multitud de razones: desde el exceso de exposición solar, el acné, deficiencias nutricionales, desequilibrios hormonales como el embarazo o la menopausia, la genética y ciertos medicamentos.
Las manchas faciales suelen ser más difíciles (que no imposibles) de eliminar porque requieren un riguroso cuidado de la piel, siempre seleccionando los productos adecuados para cada tipo de piel y mucha constancia.
Afortunadamente, existen tratamientos poderosos (y seguros) para prevenir la aparición de nuevas manchas y borrar las ya presentes, eso sí, hay que recordar que la mayoría de las patologías relacionadas con la hiperpigmentación, como el melasma, son crónicas y que, si nos vuelve a dar el sol sin que apliquemos protección solar, lo más seguro es que vuelvan a aparecer.
Tipos de manchas
Existen diferentes tipos de manchas, aunque todas nos parezcan iguales a simple vista. Es importante diferenciarlas porque también el tratamiento varía según el tipo de mancha.
Las principales que aparecen en el rostro, que pueden deberse al sol, las hormonas o factores hereditarios, son el melasma, pecas, lentigos e hiperpigmentación postinflamatoria, que se produce después de un proceso inflamatorio, agudo o crónico, como puede ser el acné, la depilación con cera o la irritación tras el uso de retinoides.
Principios activos para tratar las manchas
Es fundamental el tratamiento en casa, utilizando cosméticos despigmentantes, exfoliantes para dejar la piel lo más lisa y homogénea posible, adaptados a cada tipo de piel. Ciertos activos como el ácido kójico, la hidroquinona, la niacinamida, el phe-resorcinol, el ácido glicólico, ácido tranexámico, vitamina C, retinol etc. pueden ayudarte a reducir las manchas.
Ácido kójico
Este ácido se extrae de algunos hongos, lo que se denomina un quelante, que es un principio activo que atrapa dos átomos de cobre dentro de la tirosinasa, impidiendo que ésta haga su trabajo. Las pieles sensibles han de tener cuidado con este activo ya que puede ser un poco irritante.
Ácido glicólico
Los alfa hidroxiácidos y, en concreto, el ácido glicólico, tienen la capacidad de estimular la síntesis de colágeno, elastina y ácido hialurónico, al mismo tiempo que ejercen una acción exfoliante potente que ayuda a despigmentar las manchas oscuras. De este modo, sería un activo multiacción ya que también previene el envejecimiento prematuro y devuelve la luminosidad de la piel.
Vitamina C
Es uno de los mejores antioxidantes ya que es capaz de neutralizar los radicales libres y además es un ingrediente despigmentante, actuando también como quelante del cobre e inhibiendo la transcripción de la enzima tirosinasa, la enzima encargada de convertir la tirosina en melanina. Hay que tener cuidado porque la vitamina C pura se suele formular a pH ácido y eso puede resultar un poco irritante, así que para pieles más sensibles es mejor utilizar derivados estabilizados de la vitamina C.
Ácido Tranexámico
Este ácido previene y corrige la hiperpigmentación, incluido el melasma. Se trata de un principio activo que es un derivado sintético del aminoácido lisina que bloquea la interacción del melanocito con el queratinocito, impidiendo así la transferencia de melanina hacia las capas más externas de la piel.
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