El pasado miércoles, Marco Vridella envió un comunicado a El Programa de Ana Rosa, de Telecinco, en el cual explicaba todo lo que está sucediendo entre Sonia Ferrer y él. Hasta este momento, el cirujano plástico ha preferido guardar silencio, pero tras las declaraciones que Sonia ha hecho sobre su situación, Marco ha preferido explicarle a los medios qué es lo que está pasando. La presentadora aseguraba hace unos días, que aún no han llegado a un acuerdo Marco, principalmente por motivos económicos. Y además, estaba segura de que la custodia de su única hija iba a ser para ella, ya que "él está todo el día de viaje, por lo que mi hija no nota la ausencia de su padre"
Explica en dicho comunicado que están intentando llegar a un acuerdo a través de sus abogados. Buscan que "satisfaga a todas las partes procurando por mi parte de forma prioritaria, fundamental y esencial el mayor bienestar de nuestra hija Laura". Además, aclara que los motivos de su divorcio "son ajenos a su voluntad". La decisión de divorciarse empezó antes de que la presentadora entrara en el programa de ¡Mira quién salta!, por lo que Álvaro Muñoz Escassi no ha tenido nada que ver en esta relación rota. Sonia fue quien decidió que el matrimonio acabase, y ahora, él también ve claro que es la mejor opción.
Uno de los temas que más dificulta esta separación es la custodia de su hija Laura. Ferrer aseguraba que seguramente "la custodia sería suya", ya que él nunca estaba en casa, y además vivía en Marbella. Sin embargo, Marco Vricella ha decidido aclarar este asunto. Él asegura que su vivienda la ha fijado en Majadahonda, para así estar lo más cerca posible de su hija. Además, ha aprovechado para explicar que él había pedido la custodia compartida de su hija, pero "Sonia no quería darla".
Otro problema fundamental por el que no consiguen llegar a ningún tipo de cuerdo es por asuntos económicos. "Las condiciones económicas requeridas por su parte, al margen de estar fuera de toda lógica en su razón, concepto y cuantía, revierten explícita y claramente en su propio interés y no en el de nuestra hija. Al margen de lo anterior, sus exigencias están fuera del alcance de mis posibilidades", añade el cirujano plástico.
Por último, Marco Vricella aprovechaba para desmentir "que hayan tenido una gran bronca en una entidad bancaria". Afirma que siempre ha habido "el máximo respeto entre nosotros por deferencia a mi pareja, el respeto a los demás y especialmente por el bien de nuestra hija". Su hija para él es lo primero, por eso termina el comunicando diciendo que "desea que esta situación se solucione a la mayor brevedad y de la forma más discreta posible"