Julio Iglesias ha regresado anoche a Barcelona con motivo del nuevo Festival Jardins de Pedralbes. Tal y como publica Europa Press, el cantante volvió a vender todas las entradas, ya fueran las de 17 euros como las de 188. Muchas son las personas que no han querido perderse su segunda cita en España de la gira de este año, que dio inicio días antes en el Teatro Romano de Mérida y que le llevará después a otras ciudades como Elche, Roquetas de Mar, Ciudad Real, Marbella, Algeciras, Santander y de nuevo a Cataluña, ya que actuará en el Camp de Mart de Tarragona el 18 de agosto.
Como en otros conciertos de esta gira por medio mundo, Iglesias arrancó con su declaración hacia el público con Amor, amor, amor. Entre el público estaban Alejandra Prat, Luis Vals Taberner... así como el universal Rafa Nadal, que se convirtió en el involuntario coprotagonista de la noche acompañado de su novia, la bellísima Xisca Perelló.
Julio, fiel a sus espíritu bromista, preguntó por él sobre el escenario: "¿Dónde estás, Rafa?", y tras una nueva ovación, lo definió como el deportista que más ha hecho soñar al país en los últimos treinta años. Luego lo elogió como hijo, "aunque me gustaría que fueras mi hermano", bromeó antes de proseguir. Y fue aún más lejos en sus palabras de cariño: "Te quiero, Rafa, eres el número 1. Tú como yo sabes lo que es viajar por el mundo y entender lo importante que es estar todos unidos. Hay que fijarse en los chinos y en cómo se están expandiendo. Nuestra lengua, nuestra unión, es lo que nos hace grandes ¡España!".
El cantante se declaraba así admirador de Rafa Nadal sobre el escenario de los Jardines del Palacio Real. Además quiso consolar al tenista tras su reciente derrota en Wimbledon, añadiendo: "Al hablar de la disciplina, de la voluntad, de la inteligencia, de todas esas cosas maravillosas que queremos para nuestros hijos... Rafa Nadal las tiene todas".
Julio Iglesias también quiso confesar que estaba "feliz" porque el tenista estuviera entre el público y ante la petición de Julio, Rafa se levantó de su asiento y fue aplaudido por un público que estaba volcado. Todos le dieron su cariño al deportista, que fue recibido con una fuerte ovación cuando apareció caminando hacia su localidad entre la nube de fotógrafos.
El tenista llegaba acompañado por su pareja, Xisca Perelló, desatando la euforia de los asistentes, que le aplaudían y vitoreaban mientras sonreía tímidamente y saludaba con la mano. Su novia Xisca caminaba discretamente detrás de él, hasta que finalmente ocuparon sus asientos entre el público concitando todas las miradas. La pareja disfrutó del romántico repertorio de Julio Iglesias en concierto que contó con dos bailarines de tango en el escenario.