Hace dos meses que falleció Mario Biondo, el joven marido de Raquel Sánchez Silva. Durante este tiempo la presentadora ha tenido que afrontar no sólo el duelo por tan trágica e inesperada muerte, sino también las críticas del entorno familiar del cámara y la propia prensa, que ha cuestionado una conducta en ocasiones controvertida.
De esa manera y apenas unos días después de la noticia, Sánchez Silva voló lejos de Madrid para practicar buceo en compañía de unos amigos y descansar. Una decisión que, al igual que la de afrontar cierto compromiso publicitario muy pocas semanas después, ha sentado ciertamente mal a la familia de Mario Biondo. Tanto que desde hace dos semanas, Raquel ha preferido alejarse aún más de los focos y ha dejado incluso de escribir en Twitter.
Las imágenes que publica esta semana Sálvame ahondan en esa misma línea. La presentadora aparece muy sonriente conversando con su instructor de buceo en Formentera, su destino vacacional. Con camiseta y short negros, la periodista intercambia experiencias con su profesor, con el que se mostró atenta y sonriente.
No obstante, fuentes de la revista aseguran que la presentadora continúa tremendamente apenada. Quienes han convivido con ella en Formentera aseguran que su estado de ánimo sufre cambios constantes y que, pese a que se esfuerza en estar mejor, en ocasiones todavía se derrumba.
No obstante los Biondo, entre ellos Pippo, padre de Mario, su mujer Santina, su hermano y su cuñada Katia, han viajado a Madrid para descubrir, según su versión, la verdadera razón de la muerte de Mario el 30 de mayo. En una entrevista al diario ABC para explicar por qué creen que se debe seguir investigando su muerte, los Biondo -que ya han roto relaciones con Raquel Sánchez Silva- aseguran que "Mario no pudo suicidarse. No tenía ningún motivo para suicidarse , no tenía ningún motivo, ni depresión ni nada".
Y es que para ellos, "fue una puesta en escena (cómo encontraron al cadáver). Andrea nos dijo que Mario aquella noche había descubierto algo". Además esa noche sus hermanos hablaron con él. Y es que, el informe forense dice "presumiblemente suicidio". "Mario no se rompió el cuello, tenía los pies en el suelo y moratones en las piernas. El juez nos ha dicho que no se había drogado, aunque aún no está el informe toxicológico", explican los Biondo en la entrevista a ABC.
Por esto, la familia Biondo ha contratado a un abogado en Madrid que, "va a buscar indicios para reabrir el proceso y va a hablar con la Policía". Y en el caso de que no se pueda reabrir el caso "debo rezar para que la persona que mató a mi hijo muera pronto", explica la familia del fallecido a ABC.