La pérdida de peso de Shaila Durcal fue noticia este verano, cuando la prensa rosa se hizo eco de unas imágenes que mostraban a la cantante en las playas de Miami más delgada que nunca. Meses más tarde esa extrema delgadez sigue preocupando.
Ahora, la hija menor de Rocío Durcal y Junior, que habitualmente vive entre Miami y México, ha llegado a Madrid hace unos días para visitar a su familia, tal y como publica Lecturas. A pesar de ser invierno e ir cubierta con un abrigo acolchado largo, la cantante no podía disimular su preocupante delgadez, que se refleja en la expresión cansada de su cara.
Pero la preocupación no viene sólo por las evidencias de su físico: en su momento, Shaila confesó que tuvo problemas serios con la comida, tratando de explicar su caso. Su padre ya la apoyó en este sentido, declarando que su hija "simplemente está haciendo una dieta porque quiere verse delgada, pero lo está haciendo con médicos", y emplazó a esperar a que ganase algo de peso. Cosa que de momento no está ocurriendo.
Acompañada por su marido Dorio Ferreira, Shaila Dúrcal se ha alojado en casa de su hermano Antonio y su esposa Bárbara, en Madrid. Y pese a que las cámaras apenas han podido captar imágenes suyas, sí han sido las suficientes para certificar su estado, de una delgadez casi enfermiza.
Su padre ha querido de nuevo romper una lanza en favor de ella. "Yo creo que está bien. Tiene una bonita figura, con unas piernas largas y está guapa. Está guapísima" decía, añadiendo que él "está tranquilo", ha asegurado a Lecturas. Niega que siga teniendo trastornos alimentarios y lamenta no haber podido pasar más tiempo con ella durante esta visita. Al menos hasta el mes de enero, cuando la cantante regresará a España para afrontar diversos compromisos profesionales.