Isabel Pantoja arrasó anoche en el Casino de Aranjuez con un lleno total donde la tonadillera se llevó una enorme alegría. Nada más salir al escenario agradeció a su hijo Kiko su presencia. "Sé que estás ahí, levanta la mano a tu madre". Así fueron sus palabras tras interpretar su primer tema, el ya clásico, "Embrujá por tu querer", con el que el publico estalló en aplausos y gritos de Isabel, Isabel.
Apareció más delgada que nunca pero también con una fuerza arrolladora e imparable. Se nota como la artista se crece en el escenario ante las adversidades por las que está pasando provocados por su hija Chabelita.
Alrededor de dos horas duró la actuación, que sin lugar a duda ha sido una de las mejores de la cantante. "Este concierto, se lo dedico a mi público, pero mi hijo me ha dado la gran sorpresa de la noche. Gracias mi vida, pero no te preocupes que no te voy a sacar al escenario", le dijo con gran sentido del humor.
A lo largo del recital, Isabel se cambió tres veces y lució dos trajes y una bata de cola a cual mas espectacular. El primero de cuerpo negro pegado, ribeteado en pedrería, acompañado por una gran falda de vuelo, con estampados blancos y negros, realmente elegante, recordaba a los diseños de lata costura de Óscar de la Renta. El segundo era una bata de cola, que movió como ella solamente lo sabe hacer, con ribetes en rojo, y el tercero un traje estampado con flores.
Los tres diseños fueron un total y absoluto acierto, y los responsables de los mismos son una pareja de chicos jóvenes, sevillanos, López de Santos. "Estamos encantados de vestir a Isabel, también hemos hecho diseños para otros artistas, como Eva La Yerbabuena, y muchos más", comentaron.
Un concierto en el que hizo un repaso de sus éxitos de siempre, aunque algunos han eliminado como, "Marinero de Luces" o "Se me enamora el alma". Isabel, como es costumbre, durante el tiempo que duró su actuación, hizo alusión a temas relacionados con su vida privada que le puedan perjudicar. "Se dicen muchas mentiras, que hacen daño". Esa fue una de las perlas que lanzó. Al tiempo que también aprovechó para hacer un elogio a la copla. "Cuando yo cuelgue mi bata de cola me gustaría que hubiera artistas buenas en los escenarios, para que la copla, nunca muera".Así fueron sus palabras.
Desde el momento de pisar el escenario, hasta que se despidió, interpretando La Salve Rociera, el público que llenaba la sala, que según me informaron, eran mas de mil, de las cuales cuatrocientos eran sentados y con cena, y el precio era de 150 euros, y los otros seiscientos, solo para actuación, a 35 euros, no pararon en vitorearla, y darle palabras de aliento.
Kiko ocupó una mesa cerca del escenario, yapareció minutos antes de comenzar el espectáculo con una joven morena, y los dos saludaron a una tal Nagore, que hace tiempo mantuvo una relación sentimental con Sofía Cristo, hija del desaparecido domador de fieras, y Bárbara Rey, y a Máximo Valverde, grandes amigos de Pantoja. "Siempre que puedo acudo a sus actuaciones, me gusta estar cerca de ella" comentó.
Por el contrario, la gran ausente de la noche fue su hija Chabelita, la relación entre madre e hija, no puede ser más distante, motivo por el cual, la propia Isabel ha declarado sentirse profundamente triste.
Es de esperar que entre madre e hija, lleguen a conseguir que las aguas vuelvan a su cauce, y solucionar los problemas existentes al día de hoy. Carlos Pérez Gimeno