La crónica rosa de Es la mañana de Federico ha contado con la presencia de Beatriz Cortázar, Alaska y Carmen Jara para debatir de todos los temas de la actualidad social. En concreto, la polémica en el seno del MACBA en torno a la escultura del rey Juan Carlos denominada "Not dressed for conquering", de la austríaca Ines Doujak en el seno de la exposición "La bestia y el soberano", y en la que el rey emérito aparece siendo sodomizado.
Se da la circunstancia, tal y como se desveló en esRadio, de que la reina Sofía es la presidenta de Honor del patronato del propio Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, (MACBA), que acoge la polémica escultura. Un órgano de gobierno que acoge otros nombres sobradamente conocidos y muy cercanos al rey Juan Carlos, como el mismísimo Conde de Godó, Javier de Godó Muntañola, como vicepresidente primero de la organización.
Pero aún hay más: tal y como reveló Federico Jiménez Losantos, está el expresidente del Barcelona Joan Gaspart como vocal, así como el político nacionalista y exconsejero de la Generalidad Macià Alavedra i Moner, "jefe del sector negocios de Convergencia, y casado con una pintora de gusto discutible pero éxito comercial extraordinario", la fallecida Doris Malfeito. La influencia de Alavedra es clara y va más allá de los gustos en el arte: "No había una casa con dinero público que no tuviera un cuadro de Doris Malfeito", aseguró el director de Es la mañana.
Una vez desglosado el órgano de gobierno del MACBA, en la crónica rosa se preguntaron si en las reuniones trimestrales del Patronato se aclaró qué obras se iban a exponer, y si la misma "Not dressed for conquering" (que muestra a un pastor alemán penetrando a la líder bolivariana Domitila Barrios de Chúngara y ésta, a su vez, al rey Juan Carlos I, que aparece a cuatro patas escupiendo un ramo de flores sobre una alfombra de cascos nazis) apareció en esos encuentros.
Tal y como aseguró Jiménez Losantos, "la Reina habrá dicho: que le den". Y así ha sido, pese a la dimisión del director del museo Bartomeu Marí, que puso su cargo a disposición del MACBA a raíz de la polémica suscitada. Y la posibilidad de que se hubiese producido una imagen entre curiosa y memorable: "A la reina con Godó mirando la escultura durante la visita previa con la prensa".