Poco a poco Alfonso Diez va recuperándose de la pérdida de su esposa, la duquesa de Alba, que falleció el pasado 20 de noviembre. Sin embargo, ahora evita los actos sociales y su paciencia con la prensa parece que se ha agotado, o así lo ha reflejado la última vez.
Los paparazzis le preguntaron por la mala relación entre los hijos de Cayetana y por la supuesta paga que recibe de ellos, algo que fue una de las últimas peticiones de la duquesa. Estas preguntas no le sentaron bien y mostró su enfado con la prensa.
Parece que la relación en la familia Alba cada vez es más tensa y se dice que Alfonso tampoco mantenía con todos ellos la aparente buena relación que reflejaban en los medios. Como era de prever, aunque la aristócrata dejó casi todo cerrado antes de morir, los problemas entre los hijos ya han llegado.
La situación con la herencia de los bienes personales de la duquesa se resolverá en unos dos meses, ya que se pidió un aplazamiento para poder tasar algunos de los cuadros. De ésta, a su viudo le corresponde el 26 por ciento del tercio de mejora, tal y como marca la Ley.