¡Hola! sorprende esta semana con la exclusiva de un famoso que no suele aparecer en la prensa del corazón. Se trata del hijo menor de la infanta Pilar, Fernando Gómez-Acebo, también conocido como Coco, que aparece en la revista porque se casó por segunda vez y cinco días después nació su primer hijo. La afortunada es Nadia Halamandari, una periodista griega, y dio el "sí, quiero" en una boda secreta y sorpresa antes de llevar un año juntos.
La pareja se conoció en Palma de Mallorca hace dos años por unos amigos comunes, pero el amor surgió en la últimas vacaciones, momento en el que decidieron tener una relación a distancia, ella viviendo en Grecia y él en Madrid. Al poco de formalizar su noviazgo vino el embarazo. La pareja quiso casarse antes de que naciera el pequeño por lo que, cuando consiguieron organizarlo todo y los trámites burocráticos estuvieron en orden, ella ya no podía viajar a Madrid y la boda tuvo que ser en Atenas, tan solo cinco días antes de que naciera el pequeño.
Una de las cosas más llamativas fue que ningún miembro de la familia del Rey acudió a esta ceremonia íntima, al que solo asistió el padre de la novia y la abuela paterna.
El evento tuvo lugar el pasado 31 de mayo en el Ayuntamiento de Paleo Faliro y lo ofició el alcalde Dionisis Hatzidakis. Para la ocasión, la novia escogió un vestido de seda blanco roto con capa de encaje, diseñado por Yolancris. Para la celebración posterior, la cual también fue sencilla, Nadia se cambió de modelo por uno corto y blanco para ir a un famoso restaurante de Atenas.
Este enlace era el segundo para Fernando Gómez-Acebo, de cuarenta y un años, quien se casó en el 2004 con Mónica Martín Luque y 7 años después se divorciaron convirtiéndose en muy buenos amigos. Para Halamandari, cuarenta y dos años, es la primera boda.
Por otro lado, la periodista griega y Fernando ingresaron a las siete de la mañana del pasado 5 de junio en la Clínica de Atenas para la cesárea programada. Cuatro horas después nació el primer hijo del matrimonio, al que llamaron Nicolás, y pesó 3,700 kilos. Según informa la revista, el futuro de éstos aún no se sabe, lo único claro es que Nadia quiere seguir ejerciendo de periodista.