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Kiko Matamoros se funde en un abrazo con su hijo pero vuelve a declarar la guerra a Mila Ximénez

Tras las agrías polémicas que han protagonizado durante meses, padre e hijo han acercado posturas y este miércoles se fundieron en un abrazo. 

Tras las agrías polémicas que han protagonizado durante meses, padre e hijo han acercado posturas y este miércoles se fundieron en un abrazo. 
Diego Matamoros y Kiko Matamoros | Telecinco.es

Después de meses de encontronazos e intensas polémicas parece que finalmente Kiko Matamoros y su hijo Diego han acercado posturas. Hace unos días, Kiko Matamoros reclamó un perdón para él y para su entorno por parte de su hijo, después de lamentar el circo mediático en el que han convertido la historia. Kiko explicó que aunque a veces es difícil pedir perdón, se ha convertido en algo "necesario" e "higiénico" para que pueda existir un acercamiento entre ambos.

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Un día después de su petición, Diego Matamoros visitó el plató de Sálvame más nervioso que en intervenciones anteriores, dispuesto a llegar a un acuerdo con su padre. "Me gustaría llevarme bien con mi viejo, creo que se puede llegar a una relación cordial". Además, reconoció que lo mejor es dejar de lado el orgullo porque no le ha traído nada bueno: "Lo que me ha dado el orgullo son malos momentos y malas decisiones. Me ha cegado".

Aunque la tarde empezó calmada, y con una Carlota Corredera dispuesta a reconciliar a padre e hijo, Mila Ximénez tuvo un duro enfrentamiento con Kiko por el que incluso llegaron a abandonar el plató. La colaboradora aludió a los problemas pasados con Makoke y la influencia que ejerce sobre su marido. Unas palabras que Kiko no aceptó y por las que temporalmente abandonó el plató. A su vuelta, Carlota Corredera les pidió que dejaran sus diferencias de lado y recriminó a Kiko su abandono del plató, en un día que no era fácil para él.

Ante la presión, Diego terminó derrumbándose en la sala donde lo tenían esperando para entrar al plató. Sin entrar en detalles, volvió a confesar entre lágrimas: "Hay dos familias y ya está". Además, reveló que le costó mucho encontrar todos con su padre y que de él solo tiene una dedicatoria del año 1998: "Es injusto", dijo con los ojos llorosos.

Unas palabra que Kiko quiso aclarar reconociendo que "no han sabido gestionar convenientemente determinadas circunstancias" de la separación de Marian Flores, madre de tres de sus hijos. El colaborador también se rompió y aseguró que quiere que sus hijos no tenga la misma sensación que tuvo él con su padre, pues sabe que la vida de los hijos de padres separados es muy complicada. "No soy ejemplo de nada, pero sí me ha dolido mucho que se pusiera en duda el amor que he sentido y siento por mis hijos", comentó.

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Cuando el hijo del colaborador estaba a punto de abandonar el plató, en el último momento se acercó a su padre para darle un abrazo. Un momento en el que los colaboradores y el público no pudieron evitar las lágrimas: "Pido perdón a la madre de mis hijos si la he ofendido, y a mis hijos, pero quiero lo mismo y de corazón, con sinceridad, con honestidad. No le pido a mis hijos que quieran a nadie, pero sí respeto absoluto porque es el que me tienen que tener a mí", concluyó Kiko.

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