Después de cancelar el concierto que tenía programado para este fin de semana en la capital, David Bustamante ha continuado con su vida normal evidenciando que ya está recuperado de los problemas de salud que no le dejaron subirse al escenario.
Era la tercera vez que suspendía un espectáculo en tres meses, por lo que los rumores y especulaciones se habían acrecentado. Todos se preguntaban cuál sería el motivo y si su separación de Paula Echevarría podría haberle pasado factura.
El cantante acudió durante la mañana de este lunes a un centro de estética, apareciendo ante los medios en mitad de la polémica. Prácticamente antes de que los periodistas le abordasen con preguntas, Bustamante optó por romper su silencio con una actitud muy distinta a la que acostumbraba en los últimos meses: "Estoy encantado de la vida hasta que me hacéis todo el rato las mismas preguntas. Muchísimas gracias, de verdad", dijo el artista sin querer apenas escuchar las preguntas de los profesionales.
Tras llegar a su casa el cantante aseguró: "No me enfado, pero me vais a preguntar lo mismo de siempre". No obstante reveló el motivo que le impedía actuar, acabando así con los rumores: "Está todo muy bien, estaba mal de la garganta por eso no pude hacer el concierto". Algo que ya contó Beatriz Cortázar, que aseguró que el artista había vomitado, tenía dolores de espalda y estaba "ronco".
Desplegando sus encantos y con una sonrisa David declaró: "Está todo fenomenal, ha sido un año maravilloso. Pero no me preguntéis lo mismo seis veces. Yo estoy muy bien. Muy bien todo". Su actitud, sin embargo, cambió de manera radical cuando escuchó el nombre de Paula Echevarría. "Eso es cosa nuestra, nunca he formado parte de esto ni voy a formar. Estamos todos contentísimos y muy bien", y confesó: "Tenemos una niña y lo que queremos es que la niña sea feliz".
Unas sorprendentes declaraciones por parte de Bustamante que llegan justo cuando los rumores de su mala relación con Paula Echevarría suenan más fuerte que nunca. El pasado sábado David acudía a la residencia familiar a buscar a su hija y lo hacía sin bajarse del coche ni entrar en la casa, como acostumbraba. A esto habría que sumar las informaciones que relacionan a Paula con el futbolista Miguel Torres, que fue amigo de la pareja.