Desafortunadamente, la muerte de la leyenda del rock and roll, Johnny Hallyday, ha ido más allá de los límites de la música tras conocerse que dos de sus cuatro hijos han quedado completamente excluidos de su testamento. La mediática batalla entre los herederos del cantante francés se recrudeció la semana pasada con las declaraciones de una de las mujeres de Hallyday, Sylvie Vartan, que defendió a su hijo David, quien está enfrentado con la última esposa del cantante, la exmodelo Laeticia Hallyday, señalada como única heredera. Pero, ¿es tan mala su viuda como quieren hacernos creer sus hijos mayores?
El francés cedió en su testamento toda la fortuna a su esposa. En él consta que, en el caso de la muerte de su mujer, el total pasará a las dos hijas que adoptó con ésta, Joy y Jadeú, que aún son menores de edad. Esto no ha gustado a su hija Laura Smet, que se sumó la indignación de David, y publicó una carta dirigida a su padre fallecido en la que aseguró que luchará por recuperar lo que es suyo. "Tantas preguntas sin respuestas, todas esas ocasiones en las que tuvimos que escondernos para vernos", escribió en la misiva.
"Como una hermana pequeña"
En la autobiografía que el francés publicó hace unos años, Dans mes yeux (En mis ojos), que escribió junto a su amiga Amanda Sthers, habló sobre la verdadera relación que existió entre Laeticia y su hija Laura: "Se ocupó de ella como si fuera una hermana pequeña. Ha estado presente y ha sido paciente. Laura dijo algunas mentiras que hicieron mucho daño a la familia, pero acabó diciendo la verdad. A menudo, nos ha enfrentado entre nosotros pero cuando se le ha pedido que aclare las cosas, hemos podido salir adelante y ayudarla también. Creo que mentía porque estaba mal", describió en el libro. "Le agradezco profundamente a mi mujer el haber soportado estos embrollos creados artificialmente por Laura".
Después de la primera crisis de salud que sufrió el cantante en 2009, sus negocios pasaron progresivamente a estar en manos de la familia de Laeticia, algo que agravó aún más las malas relaciones entre los hijos y la exmodelo. Las sociedades que gestionan sus interesas están oficialmente bajo control de la abuela de esta, Elyette Boudou, apodada Mamie rock, la abuela del rock.
En el funeral de Hallyday, ni David ni Laura, hijos de diferentes madres, quisieron marchar junto a Laeticia. De hecho, se filtró que ambos se desplazaron por su cuenta a la Isla de San Bartolomé, territorio francés de ultramar situado en el Caribe, y que ninguno de ellos asistió al convite que tuvo lugar tras la incineración.