Los problemas económicos de David Bustamante han quedado atrás. Tal y como publica Lecturas, el popular cantante ha superado el bache del divorcio y del mantenimiento de costosas propiedades como la casa que en su tiempo compartió con Paula Echevarría.
Sobre la gran mansión de Villanueva de la Cañada, propiedad de David en un 80% y de Paula en un 20%, y por la que en su momento pidieron una hipoteca de 1.405.000 euros, pesaban dos embargos por deudas de David que ahora ha conseguido liquidar. David tiene pensado vender el inmueble una vez Paula, que todavía vive en la casa, termine de erigir su nueva mansión muy cerca de la anterior.
La primera de las deudas acabó en verano de 2017, y ascendía 6.500 euros. Se trataba, dice Lecturas, de un embargo administrativo a favor del ayuntamiento de la localidad madrileña donde se encuentra el chalet. Y es ahora cuando el cántabro se ha deshecho de la segunda, contraída con el Estado, y que ascendía a nada menos que 726.000 euros.
A ello se añade otra deuda más, esta vez con su casa de discos, Universal, por haber cobrado un adelanto por su anterior trabajo musical que las pobres ventas no pudieron cubrir. Eso no impedirá al cantante sacar otro nuevo disco, este mismo mes de febrero.
Toda la liquidación de ese cuantioso importe ha tenido lugar dentro del plazo legalmente establecido. ¿Cómo ha conseguido entregar tal suma de dinero de una sola vez? Lo cierto es que trabajo no le ha faltado: ahí está la aparición del cantante en Bailando con las estrellas el año pasado, donde conoció a Yana Olina, y el gran número de conciertos de los últimos meses.