La crónica rosa de Es la mañana de Federico contó con Beatriz Cortázar y Daniel Carande para tratar todos los temas de la actualidad social. Incluyendo la preocupante situación en la familia del marqués de Griñón después de que se conociese la discusión con su mujer, Esther Doña, que tuvo lugar el pasado mes de febrero en el Eurobuilding de Madrid, en la que terminó interviniendo la Policía tras la llamada de un testigo.
"No es una rencilla, es algo muy gordo y desagradable y tú rascas un poquito y ves que hay muchas disputas. Casi siempre motivados y ocasionados por los hijos", desveló en esRadio la periodista Beatriz Cortázar, anunciando nuevos frentes al respecto.
"La idea de que los hijos esperasen un comunicado de divorcio y les saliese de reafirmación" es la prueba de que pasa algo en el matrimonio y la familia del marqués, dijo Federico Jiménez Losantos sobre el texto en el que Carlos Falcó y Esther Doña anunciaban que, pese a todo, seguían juntos.
Cortázar abundó en la diferencia entre la dimensión pública, la que cuenta el comunicado, y la privada. "La familia, en conversaciones con el padre, tenía otra información. La sorpresa fue por qué ha dicho esto cuando en la familia se dice lo contrario. Y cuando hay un comunicado oficial es cuando dicen: pues todo lo que nos habían dicho estos días no se cumple".
La prueba de que algo pasa y siempre ha pasado es que ninguno de los hijos de Carlos Falcó fue a la boda "porque no les dio la gana". Todo ello pese a que la explotación de las fincas del marqués, sus empresas de vino y aceite, está ya en manos de sus hijos mayores, lo que descarta "temas económicos" en este rechazo al matrimonio con Esther Doña.