Quedan pocos días para la celebración de la boda de Belén Esteban y Telecinco ya está preparando el terreno para el que promete ser uno de los momentos más esperados de la historia de la prensa del corazón. La de Paracuellos se dará el sí quiero el próximo 22 de junio con Miguel Marcos, hombre con el que comparte la vida desde su ruptura con Fran Álvarez. Aunque asegura que no tiene nervios, Belén reconoció que está inquieta y que los preparativos de la celebración han hecho que consiga perder peso y lucir mejor que nunca.
Sin embargo no todo está siendo felicidad y grandes momentos para la colaboradora. Hace unas semanas, tuvo lugar la despedida de soltera que le prepararon sus amigas de toda la vida en Ibiza pero alguien filtró el destino a los medios de comunicación antes de su celebración. Algo que enfadó mucho a Belén.
Además, esta semana hemos sabido que hubo un topo en la segunda despedida de soltera que le organizaron sus compañeras de programa: María Patiño, Belén Rodríguez, Laura Fa, Lydia Lozano, Mila Ximénez, Gema López y Paz Padilla que no se perdieron la loca fiesta organizada por Carlota Corredera en la piscina de un exclusivo hotel madrileño. A la fiesta posterior se sumaron otros compañeros como Raúl Prieto o Jorge Javier Vázquez.
La revista Lecturas publicó este miércoles información detallada sobre el evento (precio del menú, invitados y anécdotas) y la propia Belén aseguró que ella no había proporcionado los datos. Al parecer hay un topo entre los colaboradores que asistieron a la fiesta y que se habría lucrado vendiendo la exclusiva. Durante la tarde del miércoles en Sálvame se respiró un ambiente tenso y la futura novia mostró su enfado: "Me joroba mucho".
Por su parte Kiko Hernández afirmó que el equipo del programa está "en peligro" porque podrían haber filtrado cualquier otra información y tacha de "grave" la comercialización con la intimidad de sus compañeras: "No me creo que haya sido gratis (...) Hay que tener unos límites".