Nacho Vidal fue detenido el pasado jueves por la muerte del fotógrafo de moda José Luis Abad. El conocido actor porno le sometió a un rito chamánico para desintoxicarlo de las drogas mediante la administración de un veneno obtenido del sapo bufo, conocido como la "molécula de Dios", según avanzó el diario Levante.
El fotógrafo murió en julio de 2019 en la casa de campo que Vidal tiene en la localidad de Enguera (Valencia), y después de varios meses de investigación para probar los hechos, la Policía Judicial de Játiva ha detenido al actor y dos cómplices: un empleado suyo y un familiar.
El viernes pasaron a disposición judicial y la juez de Instrucción número 2 de Játiva les tomó declaración. Los tres quedaron en libertad provisional bajo la acusación de un presunto delito de homicidio imprudente y un delito contra la salud pública, a la espera de juicio. La magistrada les retiró a los tres los pasaportes y tienen la obligación de presentarse periódicamente en el juzgado.
José Luis Abad murió el 28 de julio de 2019 a causa de un infarto de miocardio que le provocó la muerte en minutos tras ser sometido al rito del sapo bufo, un procedimiento que consiste en la inhalación de los vapores del veneno de un sapo de la especie bufo alvarius y que ciertas corrientes chamánicas vinculan con un viaje astral y mental con poderes curativos. El fotógrafo sufrió convulsiones y asfixia y cayó completamente amoratado y rígido al suelo, pero ninguno de los testigos llamó al servicio de emergencias, según consta en el atestado.
La familia de la víctima pidió que se investigara una muerte tratada desde un principio como accidental. Nacho Vidal declaró ante la Guardia Civil que llevó a cabo el rito de forma "desinteresada" y por la amistad que le unía a una prima suya. Además, no era la primera vez que realizaba este tipo de prácticas.
La investigación determinó que se trataba de una actividad con fines terapéuticos o medicinales que en sí misma suponía un serio riesgo para la salud pública, con la que además se enmascaraba un ritual ancestral aparentemente inofensivo. Con este reclamo se captaba personas fuertemente sugestionadas, en un estado de vulnerabilidad o necesidad de sanar determinadas dolencias o adicciones, para lo cual se ofrecían métodos alternativos a la medicina.