Antonio David Flores y Olga Moreno afrontan uno de los momentos más complicados de su matrimonio por la incesante aparición de mujeres que hablan de supuestas infidelidades del colaborador a su mujer. Al doloroso testimonio de Isabel Ávila se suman las fotografías en las que Antonio David aparece en actitud muy cariñosa con la reportera de El programa de Ana Rosa Marta Riesco.
Aunque se podría pensar que el matrimonio está en horas bajas, Olga ha vuelto a dejar claro en sus últimas declaraciones que cree ciegamente a su marido, del que está muy enamorada.
Después de un fin de semana en el que Antonio David ha podido disfrutar de su familia en Málaga, Olga se queda sola de nuevo en la ciudad y reconoce que lo que más le preocupa de esta situación es cómo lo están llevando sus hijos.
- Pregunta: ¿Cómo ha sido el fin de semana?
- Respuesta: Bien, todo bien. Hemos estado bien. No es un trago bueno, no por mí ni por mi marido, sobre todo por los niños. Llevo dos días sin llevar a mi hija al colegio, no me apetece que una cámara me pregunte porque estoy perfectamente con mi marido. Amo a mi marido con locura, él me ama a mí, no hay ningún problema. Entiendo dónde trabaja mi marido pero lo que no voy a consentir es que me metan una cámara llevando a mi hija al colegio.
- P: ¿No hay nada que os pueda desestabilizar?
- R: Nada, llevo 20 años con él. Sé perfectamente con quién estoy, con quién me acuesto y él sabe perfectamente todo. Hemos tenido momentos malos por él y por mí, nos hemos hecho daño los dos pero son 20 años. Tenemos una familia muy bonita, le guste a la gente o no. Tengo unos niños maravillosos.
- P: ¿No te afectan las imágenes con la reportera?
- R: Sí, claro que me afecta, pero sé con quién estoy. No tengo ningún problema y confío plenamente en él, me afecta porque mi hija ha tenido que decir 'esto no me gusta nada'.
- P: Él también lo pasa mal por ti...
- R: No por mí, porque él sabe perfectamente lo que hay, es por los niños, simplemente. Es muy desagradable que llamen a mi madre, a mi hermana, a mi suegra, creo que es desagradable.
- P: En cualquier caso, estáis bien.
- R: Quiero decir que estoy espectacularmente bien con él, no tengo ningún problema. Nos hemos sentado, hemos hablado, nos hemos ido a comer con amigos... Yo solo quiero trabajar y mi marido, que es el que está allí, hará su trabajo. No hay más. No saquéis lo que no hay.