La actriz Blanca Romero ha roto su silencio tras saltar los rumores que aseguraban que había decidido abandonar Yerma, el espectáculo que protagoniza junto a Rafael Amargo, a raíz la detención del bailarín acusado de delitos de tráfico de estupefacientes y pertenencia a grupo criminal. Después de tres días en el calabozo, y de prestar declaración ante el juez, el bailarín era puesto en libertad para estrenar, tan solo 48 horas después, la citada obra de teatro en la que Blanca Romero no apareció pese a estar anunciada.
En una entrevista ofrecida a Espejo Público, el bailarín admitió que la actriz les había dejado "tirados": "No sé qué hay de cierto. Me he enterado por un periodista que me lo ha dicho aquí en la puerta. Puede ser una mentira porque le hemos dejado mensajes y no ha contestado. Pero es una señora para decírmelo a mí y no a un periodista. Si fuera cierto, me habría llamado y a mí no me ha dicho nada. Está callada...", afirmó. Asegurando que la obra "va sola" y "está funcionando", por lo que la ausencia de la intérprete no ha afectado a la venta de entradas.
Este jueves, Blanca Romero se ha pronunciado sobre el tema y confirma su intención de no continuar con su trabajo en la representación teatral debido "a la presión mediática" que ha supuesto la detención de Amargo: "La presión mediática no me ayuda a cumplir un sueño que tenía desde pequeña. Todo se ha ensombrecido y se ha liado como nadie esperaba. Pero creo que la vida dispone y Dios propone, ya será en otra ocasión", ha asegurado en una entrevista para La Vanguardia.
No obstante, no descarta reincorporarse si la tormenta mediática cesa y se aclara la polémica en torno al artista granadino: "Esperaré a ver si la obra llega al teatro Campoamor de Oviedo, para poder participar, pero me gustaría que se acabara la polémica para poder disfrutarlo".
La actriz tenía previsto incorporarse a Yerma entre los días 23 de diciembre y el 10 de enero, coincidiendo con las vacaciones escolares de su hijo Martín: "Así se acordó, todo estaba claro, por eso no he dado explicaciones hasta ahora, porque la fecha no había llegado". Y aclara que su decisión no tiene que ver "directamente" con la detención de Amargo: "Creen que es porque yo estoy juzgando a vida de alguien, pero ese no es mi estilo (...) Espero que Rafael Amargo, como quieren sus padres y la gente que le quiere, esté bien. Yo deseo verlo bien y triunfando. Confío en su inocencia".