Tras arremeter contra su hija, que la denunció con posterioridad a la pelea que mantuvieron, Rocio Carrasco metió en el conflicto penal al joven David Flores, su otro hijo afectado de ciertas patologías y con necesidades especiales, que también declaró en la denuncia de su hermana contra su madre, y a quien con cariño llama "su enano".
La madre leyó en alto y esgrimió un informe posterior a esa denuncia, mostrando claramente cómo su hijo David aseguró a las autoridades que sí "vio pelearse a dos brujitas y que su madre pegó a su hermana", pero también cómo "él estaba dormido pero su hermana se lo contó". También —subrayó— que su padre le había dicho lo que tenía que decir.
Rocío Carrasco criticó duramente ese informe manejado por el juzgado que favoreció que los niños se fueran con su padre, aunque dijo a la vez respetar los dictados de la justicia, y lo esgrimió ante las cámaras. El documental lo mostró con claridad.
Antonio David intentó acusar a Rocío de no contemplar las necesidades especiales y patologías de su hijo, a quien todos se han esforzado en mantener al margen... hasta que no han podido evitar meterlo. "Nunca las he eludido, mis hijos fueron lo más importante de mi vida desde que nacieron", explicó al respecto.