Después de casi 15 días alejada del foco mediático en su Cádiz natal, Ana María Aldón volvió este fin de semana a la casa que comparte con José Ortega Cano en Madrid. Hundida y confesando que ha tenido que pedir ayuda profesional para intentar superar este delicado momento anímico, la colaboradora ha prefiriendo mantenerse en un segundo plano y este fin de semana no acudió a su puesto de trabajo en Viva la vida, pero sí recibió una visita muy esperada, la de Gloria Camila.
La hija de Ortega Cano llegó este domingo al domicilio familiar para reencontrarse con la mujer de su padre y mantener la conversación que tenían pendiente desde hace varias semanas; concretamente, desde que Ana María arremetió contra ella en la revista Lecturas, acusándola de meterse en su matrimonio y asegurando que ella jamás de permitiría a su hija que hablase de su marido como Gloria hizo con ella al criticar los trajes que diseñó para la Sálvame Fashion Week.
Después de un par de horas en el interior, la hermana de Rocío Carrasco abandonó el domicilio familiar de lo más sonriente, aunque sin desvelar ningún detalle de su 'reunión' con Ana María. ¿Firmaron la paz? ¿Cómo vio a la mujer de su padre? ¿Destrozada como aseguran quienes han podido hablar con ella? "No os voy a decir nada, lo siento", dejó claro Gloria Camila en sus primeras declaraciones tras su comentado reencuentro.
Sin embargo, y a pesar de no querer entrar en detalles sobre cómo está su relación con Ana María, sí quiso salir al paso de las informaciones que apuntan a que fue ella quien echó a Gema Aldón de la casa en la que vivía en una finca propiedad de Ortega Cano mientras su madre estaba concursando en 'Supervivientes': "Todo se verá donde se tiene que ver", afirmó sorprendida por estas acusaciones, advirtiendo que tomará medidas legales contra todos aquellos que acusen a ella o a su padre de falsedades.