
Toda una leyenda de la música, Diana Ross ha iniciado este verano una gira europea y actúa en Marbella este 6 de julio. A sus setenta y ocho años, plena todavía de energía y pasión, continúa cantando sin que por el momento haya pensado en su jubilación. Una mujer que ha conseguido verdaderos récords a lo largo de sus sesenta años de carrera: cien millones de discos vendidos y número 1 en las listas de éxitos norteamericanas de la revista Billboard en dieciocho ocasiones, lo que han logrado muy pocos, entre ellos Los Beatles. Su nombre es garantía de que en el escenario mantiene su gran magnetismo con el público, dueña de una voz con registros de soprano, a través de un amplísimo repertorio pop, soul, R&B, jazz, música-disco…
Hija de un soldado blanco del Ejército de los Estados Unidos y de una maestra negra de Alabama, nació en Detroit, Michigan, y de niña no pensaba dedicarse al canto, sino que pretendía entrar en una escuela de diseño, atraída por el mundo de la moda; lo que no sucedió, afortunadamente para los amantes de la música. Fue líder de The Supremes, vocalista en un grupo excepcional en una discográfica que se ufanaba de tener en sus filas a las mejores voces negras, la Tamla-Motown. Aquella agrupación fue inicialmente cuarteto en la década de los 60, después trío hasta que en los 70 Diana Ross se convirtió en solista.
A nuestro país vino más de una vez para cantar en Televisión Española. En los 80 grabó un dúo con Julio Iglesias: All of you. Y en diciembre de 1993 un álbum de villancicos en directo en Viena junto a Plácido Domingo y José Carreras. Una de sus muchas joyas discográficas.
Pero también Diana Ross se ha significado como actriz, presentando musicales en Broadway y como protagonista de películas de éxito, una de las cuáles le permitió competir por un Oscar, aunque no lo obtuviera: la nueva versión de El mago de Oz, en el papel que había estrenado muchos años antes la inolvidable Judy Garland. Asimismo llevó a la pantalla la complicada vida de la legendaria Billie Holiday: Lady Sings the Blues. Mahogany fue otro de sus filmes más taquilleros.
Su vida no ha sido tan agitada como la de otras colegas aunque figure en su biografía un incidente en diciembre de 2002, cuando fue arrestada por conducir en estado de embriaguez. Respecto a sus relaciones sentimentales, estuvo emparejada con Berry Gordy, también con Gene Simmons, y se casó en dos ocasiones: la primera en 1971 con Robert Ellis Siberstein, matrimonio que duró seis años; su segunda boda fue con Arne Naess, en 1985, del que se divorciaría quince años después. No se le han conocido actualmente otros amores, al menos que se hicieran públicos, si es que los ha tenido. Ha sido madre en cinco ocasiones.
A la muerte de Michael Jackson, Diana sufrió un duro momento, pues se querían mucho. Como si ella fuera quien lo protegiera, casi maternalmente. Tanto que el controvertido y famoso ídolo había dispuesto de que, en caso de fallecer su avejentada madre, fuera Diana quien se ocupara de sus hijos. No se produjo esa situación. Ella siempre defendió a su amigo en contra de las sospechas que existían acerca de los supuestos abusos de Michael con los niños que tenía albergados en su mansión.
Diana Ross, sobre todo, ya es historia de la música pop-rock. Y aunque en estos últimos tiempos lo que guste en general a la gente joven sean otros ritmos, nada de esto consigue borrar de la memoria cuanto esta gran dama ha significado en su larga carrera, que no quiere, como decíamos, concluir. Hace pocas semanas intervino en un programa especial junto a otras figuras en homenaje a Isabel II con motivo de su 75 Jubileo. ¡Cuánto nos gustaría estar en Marbella para presenciar su espectáculo!


