
La crónica rosa de Es la mañana de Federico contó con Isabel González, Daniel Carande y Emilia Landaluce para abordar todos los temas de la actualidad social. Como, por ejemplo, el quinto capítulo de En el nombre de Rocío, en el que Rocío Carrasco dedica casi íntegro el episodio a atacar a José Ortega Cano.
Todo sucede, tal y como apuntó la subdirectora de Es la mañana de Federico, el mismo fin de semana en el que Ana María Aldón regresa a la televisión para ser entrevistada por Toñi Moreno en Déjate querer. Una demostración de los intentos de la cadena de crear polémica y conversación en torno al matrimonio del maltrecho torero.
Según Federico Jiménez Losantos, "ya dijimos aquí que el próximo maltratador y víctima de la banda de La Fábrica de la Tele sería Ortega. Mira lo que han tardado, han adelantado una semana porque les conviene. Son maltratados".
En concreto, una de las sombras de sospecha que vierte Rociíto es sobre Amador Mohedano y una de las imágenes más famosas que muestran a un Ortega Cano un tanto perjudicado y cantando "Estamos tan a gustito. Dice lo "que le parece el hecho de que emitieran la imagen del ‘Estamos tan gustito’. No sabe quién po filtró, sospecha de Amador Mohedano. Pero luego emiten el mismo corte de él cantándolo".
No obstante, el periodista Daniel Carande dio la clave que desarma la versión de Rocío Carrasco: "En esa boda estaba la prensa", dijo sobre el evento en el que fueron captadas las imágenes, y que fue nada más y nada menos que la muy mediática boda de la propia Rocío con Antonio David.
Para Federico Jiménez Losantos, una nueva muestra de lo que pretende La Fábrica de la Tele con el torero. "Llevan varios meses provocándole. Entra su familia al trapo, Gloria Camila y Ana María Aldón en programas…", dijo, señalando que al final logran que todos alimenten la polémica.