Menú

El cómico Ángel Martín y su ingreso en un hospital psiquiátrico

Un grave brote psicótico llevó a Ángel Martín a ingresar en el hospital.

Un grave brote psicótico llevó a Ángel Martín a ingresar en el hospital.
Ángel Martín y Eva Fernández. | Cordon Press

Siempre se ha dicho que tras la máscara de un cómico, el rostro pintarrajeado de un augusto circense o, simplemente, quien nos hace reír a cara descubierta, puede haber en su vida privada una historia triste, dramática o contrapuesta a su profesión. Ángel Martín, conocido por sus monólogos televisivos, es uno de ellos. En 2017 fue ingresado en un hospital psiquiátrico donde los primeros quince días estuvo atado a una cama, entre delirios que nublaban su mente. Ahora lo ha contado en un libro autobiográfico.

Ello sucedió en una temporada que Ángel Martín, quizás por culpa del éxito que disfrutaba, cayó en la trampa de consumir ciertas sustancias. Hay quienes adictos a las drogas llega un día en que no lo cuentan: rockeros idolatrados o meros jóvenes marginales que creen alcanzar el paraíso. Y lo que encuentran es la muerte a temprana edad.

Ángel gozaba de la popularidad obtenida a lo largo de los años con sus apariciones en El Club de la Comedia, Sé lo que hicísteis, En el aire, Órbita Laika y otros. Guionista, presentador, músico y ente todo feliz actor de monólogos, este barcelonés nacido hace cuarenta y cuatro años fue fichado por los productores de Paramount Comedy. Con Fuentes y Cía tuvo también una colaboración temporal. Anunció las campanadas de fin de año en dos ocasiones, junto a Patricia Conde. En definitiva, estaba en un momento dulce. Hasta que su novia, la actriz Eva Fernández, se dio cuenta de que Ángel atravesaba un desconcertante momento. La felicitó por Facebook por una película en la que ella no había trabajado. Y en otra ocasión llenó la casa en que vivían de globos por todas partes. Sin más dilación, Eva llevó a su compañero al hospital Puerta de Hierro de Madrid, donde inmediatamente lo ingresaron en el departamento de psiquiatría. El diagnóstico no se hizo esperar: un brote psicótico. En esos largos días, como decíamos atado a una cama, Ángel Martín sufría visiones, colores vivos que atormentaban su mente, una Luna cercana, como si estuviera inmerso en una aventura dentro de una nave espacial. Y algo más concreto: "hablaba" con los perros… y le respondían, no con ladridos, sino con lenguaje humano. Según lo que él pensaba.

angel-martin-libro.jpg
Ángel Martín | Cordon Press

Aquella etapa sirvió para que Ángel Martín, una vez salido de tan dura experiencia, recapacitara, hiciera un balance de su vida, que él consideró quedaba ahora modificada: "Escucho más a los demás; antes de estar loco era un imbécil". Confesaba que nunca supo cuándo saltó el chip, ni se enterará nunca del principio de ese brote psicótico. Pero se salvó. Y ha podido efectivamente contarlo, en un libro que no le sugirió ningún psiquiatra, sino que nació de su propia mente; Por si las voces vuelven, donde relata todos los episodios que surgieron entonces. Figuró en las listas de los libros más vendidos en los últimos meses, según hemos comprobado en varios periódicos.

Eva Fernández, su amor, queda dicho estuvo y sigue estando pendiente de él. Además de actriz es diseñadora de ropa y bisutería; experta en culturismo. Practica el "pole dance", que es una complicada modalidad de baile sobre una barra. Ángel cuenta con ella para varios proyectos artísticos de su productora, con la que ha realizado varios documentales. Es muy activo con sus proyectos cinematográficos, teatro, comedias musicales; habitual en redes sociales, youtube, twitter, tiktok… En fin, que no para. Y no quiere dejar los monólogos con los que tantas risas ha arrancado en directo o a través de la pequeña pantalla.

En Chic

    0
    comentarios