Tamara Falcó reapareció este martes como embajadora de Kronos Home, promotora del exclusivo ático en Puerta de Hierro al que se mudará próximamente. Un acto cuya asistencia confirmó hace días, pero que más tarde canceló cuando se descubrió el engaño de su prometido Íñigo Onieva apenas unas horas después de entregarle el anillo.
Un titubeo que no ha impedido a la hija de Isabel Preysler dar la cara ante la prensa para ofrecer su versión de los hechos demostrando su fuerza y valentía junto a su gran amiga Eugenia Silva. Primero lo hizo por vía telefónica, antes de en persona.
Como embajadora de Kronos y presentadora, Eugenia se ha limitado a asegurar que van a ver "una película preciosa de unas obras magníficas, de los mejores arquitectos del mundo". "Las casas son parte de nosotros, nos gusta hacerlas especiales", explicó Eugenia, buena amiga de Tamara, de la que ha dicho que está "increíble, guapísima". Cuando le preguntaron por la polémica con Íñigo Onieva, Eugenia se limitó a decir que había venido a "hablar de arquitectura".
En el momento de aparecer ante la prensa, los periodistas se han volcado y la han dado una magnífica ovación que se repitió a su marcha tras varios minutos conversando con periodistas. Tamara Falcó habló del shock de los últimos días e incluso ha bromeado con ello: "Para mí, mi madre ha sido quien ha filtrado los vídeos".
"Quiero dar las gracias a todo el mundo que me ha apoyado, mis amigos, mi familia, y ahora ¿cómo estoy yo?", comenzó la socialité. "Pues aún es todo muy reciente, estoy en estado de shock. Reconozco que estoy contenta de que haya salido ahora. Si todas estas noticias salen estando casada o peor, ya con familia, habría sido terrible. Entonces si no llego a tener esos vídeos, la verdad... Decidí apostar por Íñigo y fue hasta que vi que era verdad".
"El Íñigo con el que yo me he prometido no tiene nada que ver con ese. No lo reconozco. De verdad, yo sé que es difícil de creer", dijo. "Siempre he creído que la base es la confianza y en una relación tiene que darse esa libertad", dijo, lo que no quiere decir que deba haber "límites".
"Mi familia y mis amigos, cada uno tenía sus opiniones, pero no puedes acusar de algo tan grave sin pruebas y yo estaba enamorada", dijo, subrayando el tiempo pasado en la frase. Negó de nuevo toda posibilidad de un regreso con Íñigo Onieva: "Lo veo imposible", dijo tajante. El anillo -contó- lo ha dejado en casa de su madre, Isabel Preysler.
Tamara dijo que lo peor fue "la mentira". El viernes por la noche él empezó a decir ‘bueno, puede que sea verdad’. Y le dije que como lo fuera, ahí se acabaría todo. "Por el cariño que le he tenido no voy a seguir. Todos habéis visto, no solamente me ha mentido a mí", dijo crecientemente afectada.
A Tamara le preguntaron qué dijo su madre, a la que define como todo "un apoyo", y bromeó con la teoría conspiratoria de que había sido ella quien filtró los vídeos, mostrando de nuevo su buen humor.