Tamara Falcó no está pasando por un buen momento personal tras cancelar su compromiso con Íñigo Onieva y descubrir que le fue infiel semanas antes de pedirle matrimonio. La hija de Isabel Preysler pasa estos días refugiada en la casa familiar de Puerta del Hierro (Madrid), pero tiene claro que la situación no va a afectar a sus compromisos profesionales.
Si el pasado martes hizo su flamante reaparición ante los medios de comunicación en el evento de Kronos Homes, esta semana volará a México para participar como ponente en el XIV Congreso Mundial de las Familias, un evento público internacional religioso que "busca unir y equipar a líderes, organizaciones y familias para afirmar, celebrar y fortalecer a la familia como el entorno fundamental y natural clave para el florecimiento de individuos maduros y sociedades sostenibles".
Tamara intervendrá el sábado 1 de octubre a las 13:30 horas de México en una conversación con jóvenes y a las 16 horas en la mesa ‘Familia y entretenimiento’ junto al cineasta Juan Manuel Cotelo, el Director General de Angel Studios y VidAngel, Neal Harmon, y el actor y director del movimiento católico Viva México, Eduardo Verástegui.
Junto a ella estarán también Ignacio Arsuaga, presidente de la asociación ultracatólica Hazte Oír, y compartirá espacio con más de 50 ponentes, entre ellos los españoles Tomás Melendo, doctor en filosofía, el sacerdote Guillermo Serra o el psiquiatra Enrique Rojas.
Tras la celebración del Foro, la marquesa de Griñón prolongará su viaje en el país azteca para poder olvidarse de la polémica por su ruptura y tomarse unos días de desconexión, según El programa de Ana Rosa. A su vuelta, Tamara no regresará al domicilio de su madre, sino que se instalará por fin en el ático que adquirió recientemente y que ya está preparado.
