El 15 de octubre de 1975, hace por tanto cuarenta y siete años, se produjo el primer desnudo teatral en España, protagonizado por la gran actriz María José Goyanes. Fue durante la representación de Equus, comedia dramática del británico Peter Shaffer, obra por cierto que ahora ha vuelto a la programación escénica madrileña, con otro reparto, naturalmente.
Aquella ocasión dio paso a un escándalo promovido por grupúsculos como Los Guerrilleros de Cristo Rey, que amenazaron a la compañía dirigida por Manuel Collado, muy en particular a su protagonista femenina, que era precisamente entonces su esposa, la mentada María José Goyanes. Recibió a lo largo de muchas semanas no sólo insultos, también cartas anónimas llenas de amenazas y hasta una que resultó ser una bomba, a tiempo desactivada.
En vísperas de aquel escandaloso estreno, como era preceptivo, la censura, personificada por cuatro funcionarios, dio su visto bueno para que en el madrileño teatro de la Comedia se alzara el telón. Mas el mismo día que esto sucediera, el entonces Director General de Teatro, Mario Antolín (a la sazón esposo de la actriz María Fernanda D´Ocón) revocó el informe de autorización de la obra realizado por cuatro censores, como decíamos, a los que se expedientó sin contemplaciones. Hubo un "tira y afloja" en el despacho de aquel Director General y Manuel Collado pudo acordar que la pareja formada por María José Goyanes y Juan Ribó aparecieran desnudos de cintura para arriba; debajo llevarían unos "slips" color carne.
Aún así, queda apuntado que el escándalo quedó servido. Y sobre todo María José Goyanes significada para siempre como una "puta", según los anónimos que le llegaban al teatro, cuando no a su paso, cara a cara. Espectadores libidinosos llegaban al teatro, muchos de ellos desde pueblos y hasta provincias lejanas; querían contemplar "in situ", las tetas de María José quien, según ella misma diría pasado el tiempo, tampoco eran para tanto, pequeñas y nada espectaculares.
Ocurrió también por esos días, un mes antes de la muerte de Francisco Franco el histórico 20 de diciembre de 1975, que otra popular actriz, Victoria Vera, también pasó a la historia de los primeros desnudos en nuestro país desde que se instauró el franquismo: Victoria Vera. Fue sólo dos días después del estreno de María José Goyanes, el 17 de octubre de aquel mismo año, en el teatro Reina Victoria, apenas a cien metros a espaldas del otro, el de la Comedia. La obra que representó V.V. fue ¿Por qué corres, Ulises?, de Antonio Gala. La protagonista mostraba también sus pechos, lo que volvió a suscitar amenazas y condenas de una sociedad pacata y un sector eclesiástico o al menos representado por muy peligrosas facciones, de la política la Triple A; de lo otro, los Guerrilleros de Cristo Rey. Ni que decir que, pese a ello, las dos funciones continuaron representándose mucho tiempo con gran éxito taquillero. Los críticos, en general, tanto en una como en otra obra, fueron tanto elogiosos como comprensivos con la situación en las que fueron dadas a conocer, en un tiempo de crispación por la desaparición de Franco y el vacío político que supuso; la inquietud sobre el inmediato futuro, antes de la Transición.
Volviendo a la figura de la pionera de aquel despelote, que no era para tanto y hoy produce sarcasmo e incredulidad – pero así era la España de la época -, anquilosada en costumbres del pasado, en la persecución implacable de todo aquello relacionado con el sexo y el sexto mandamiento (movimientos políticos al margen), María José Goyanes demostró en toda su larga carrera artística su enorme talento interpretativo. Descendiente de una gloriosa dinastía teatral, iniciada por su antepasado, Alfonso Muñoz y continuada por su madre, Mimí, fue desde corta edad actriz en ciernes, debutando en el cine en una película de Marisol, Un rayo de luz, apenas con dos o tres frases. En los añorados "Estudio 1" de la Televisión Española de los 60 y primeros 70 y otros espacios dramáticos, fue muy asidua en los repartos. Casó con el primero actor y luego brillantísimo director, Manuel Collado Sillero, con quien tuvo un hijo, Javier, que también ha seguido la profesión familiar. Manuel, sorprendió a su mujer cuando se separó de ella, con una historia alrededor que preferimos silenciar. Murió pronto. Fue uno de los renovadores de la escena española, mezquinamente olvidado por los de su mismo gremio.
Nunca dejó de trabajar en la televisión, el cine y sobre todo los escenarios María José Goyanes, mujer de fuerte carácter, llena de vitalidad, capacitada para cualquier género sea cómico o dramático sobre todo, incluso del teatro clásico. Su última gira en fechas cercanas por toda España la hizo con su querido compañero Emilio Gutiérrez Caba, representando Galdós enamorado.