Dabiz Muñoz y Cristina Pedroche estudian tomar medidas contra Lecturas por su número del pasado miércoles donde destapaban el embarazo de la presentadora. La revista lo anunció a toda portada en una exclusiva que incluía varias fotografías que apuntalarían a esta dirección. En las imágenes publicadas se veía a la presentadora junto a su marido, Dabiz Muñoz, saliendo del edificio de Ginecología y Obstetricia del Hospital HM Montepríncipe, en Madrid.
La revista Lecturas destapó que Pedroche y el cocinero esperan la llegada de su primer hijo para el próximo verano y que sería durante la gala de las Campanadas cuando lo darían a conocer al mundo, algo que finalmente no ocurrió. La presentadora ya explicó en El Hormiguero de Pablo Motos que su vestido sorpresa de este año incluiría la modalidad del "body painting", que consiste en decorar la piel emulando una tela, técnica que lució finalmente en sus brazos, pero no es su barriga como muchos esperaban.
Horas después de la salida al mercado de la revista, cuando apenas quedaba un día para las Campanadas, Pedroche y Muñoz se vieron obligados a confirmar la noticia señalando que estaban apenados por no haber podido dar ellos la noticia. "No hemos podido elegir ni cuándo ni cómo dábamos la noticia. No nos han dejado. No han sido nuestros tiempos ni nuestras formas y eso nos ha puesto muy tristes. Hay líneas rojas que nunca se deberían cruzar. Porque había mucha gente importante para nosotros, gente de nuestra familia que no sabía nada, además de que todavía no era seguro decirlo. Ni nos llamaron para confirmar o desmentir", escribió la colaboradora de Zapeando en sus redes sociales.
"Aun así, estamos ante el viaje más apasionante que vamos a vivir y por supuesto lo queríamos compartir con todos vosotros, como siempre, por aquí. Nada de exclusivas, nada de trabajo", continúa el mensaje, dejando caer que en ningún caso hubiesen desvelado la noticia durante la retransmisión de las Campanadas. "Esto es solo personal. Lo más personal e íntimo que tenemos. Ojalá nos hubieran dejado hacerlo a nosotros primero (…) Punto y aparte. No conocemos mayor felicidad que la que nos da este bebé que se está cocinando a fuego lento para ser nuestro mejor guiso".
El digital Informalia va más allá y asegura a la pareja no le ha hecho "ninguna gracia" que se haya hecho pública la noticia sin su consentimiento. De hecho estarían "tan molestos" que no descartan tomar medidas legales contra Lecturas: "Lo consideran algo muy íntimo y personal. Hay líneas rojas que nunca se deberían cruzar". Según esta fuente, se estarían planteando demandar a la publicación "por un delito contra la intimidad e incluso de revelación de secretos". Habrían consultado a sus abogados y les habrían animado a demandar ya que temas "como los embarazos son datos sensibles que no deben ser revelados sin el consentimiento de los implicados".
Ya el comunicado emitido por la pareja apuntan en esta dirección al señalar que la noticia es algo "íntimo" y "personal" y añaden que había miembros de su familia que todavía no eran conocedores de la noticia. Ellos habrían querido anunciarlo a su manera y nadie les llamó para consultar o confirmar.