Blanca y Borja Thyssen acudieron este martes a juicio en la sala de lo Penal de Madrid. Se enfrentan a una pena cada uno de tres años de cárcel y a una multa superior al millón de euros.
La Fiscalía Provincial de Madrid solicita tres años de prisión y una multa de un millón de euros para ambos, y su mujer Blanca Cuesta por presuntamente defraudar a Hacienda la cantidad de 336.000 euros. El representante del Ministerio Público les acusaba de haber defraudado a las arcas públicas un total de 336.417,89 euros correspondientes al ejercicio fiscal de 2010.
Con traje y camisa celeste en el caso de Borja, que en esta ocasión ha prescindido de la corbata, y con pantalón de pinzas gris, jersey de cuello vuelto en azul cielo y abrigo corto de paño negro en el de Blanca, el matrimonio ha hecho su entrada en el Juzgado de lo Penal número 15 rodeados de una nube de medios de comunicación, sin hacer declaraciones y limitándose a dar las "gracias" en varias ocasiones.
Un momento en el que, fruto del agobio del momento ante la expectación que ha generado el juicio al que se enfrentan por un presunto delito de fraude a la Hacienda Pública, el hijo de Carmen Cervera ha empujado a los reporteros, tirando uno de los micrófonos al suelo.
No obstante, el juzgado de lo Penal nº 15 de Madrid acordó suspender este mismo martes la vista oral del juicio por supuesto delito de Borja Thyssen y Blanca Cuesta, toda vez que los abogados de los procesados han presentado antes de iniciarse la misma un informe pericial, que han solicitado que se incorpore a la causa.
Según fuentes manejadas por Libertad Digital, la acusación, formada por la Fiscalía y la Abogacía del Estado, ha solicitado la suspensión del juicio para examinar el informe y aún no hay fecha de nuevo señalamiento.
Nada de ello impidió que el lunes Borja estuviera presentando la exposición en el Thyssen dedicada a Lucien Freud con su hermanastra Francesca y sin su madre.