
Tamara Falcó ha roto su silencio tras filtrarse a los medios otra presunta infidelidad de su prometido, Íñigo Onieva, apenas unos días antes de la boda. La marquesa de Griñón se ha reafirmado en su amor con la imagen de un beso romántico y unas declaraciones en las que emplaza a la celebración del evento el próximo sábado en la finca El Rincón.
La infidelidad confesada por una agente de la Policía Nacional cuando Onieva y Falcó eran pareja no parece haber afectado a los planes de una enamorada Tamara, que asegura que "ya no nos queda más que una semana y un día para estar unidos para siempre a ojos de Dios mi Íñigo. No ha sido fácil llegar hasta aquí, pero lo hemos logrado y somos muy felices. Como me decías anoche, vamos a seguir bailando toda la vida y estoy deseando que esa vida empiece ya. Te quiero".
Mientras sucede el nuevo escándalo Tamara viaja a Nueva York para la última y definitiva prueba del vestido de novia. hAsí lo adelantaba la propia Tamara este jueves en 'El Hormiguero', revelando que este viernes haría un viaje exprés a la ciudad de los rascacielos acompañada por Isabel Preysler, para su última prueba del traje en el atelier central de Carolina Herrera.

Sigue, por tanto, la cuenta atrás para darse el sí quiero ante más de 200 invitados en el palacio El Rincón y, a una semana del gran día, toca completar los últimos flecos pendientes para que todo salga perfecto.
Es innegable que Tamara Falcó ha bajado varios kilos tras su ingreso de varias semanas en la clínica Buchinger -se aprecia a simple vista tanto en su cuerpo como en su cara- que Tamara ha perdido volumen gracias a su tratamiento détox, por lo que quizás haya que 'reajustar' su look nupcial.