
Manuel Díaz el Cordobés afronta su última temporada taurina tras 30 años en los ruedos. El pasado 30 de abril se cumplieron tres décadas desde que tomó la alternativa en la Maestranza de Sevilla, con Curro Romero como padrino y Juan Antonio Ruiz Espartaco de testigo y será este 2023 su último año en activo.
El diestro fue una de las figuras que participó en el festival benéfico de Almonte (Huelva) en beneficio de las hermandades de penitencia almonteñas, junto con El Fandi, Cayetano Rivera y Daniel Luque. Hasta allí se desplazaron sus hijas Alba (23), fruto de su matrimonio con Vicky Martín Berrocal, y Triana (15), su hija menor con Virginia Troconis.
La jóvenes siguieron con mucho interés la faena de su padre desde la barrera, que triunfó saliendo por la puerta grande en una tarde en la que cortó dos orejas y el rabo. Ambas parecen haber heredado el amor por la tauromaquia de su padre, que tras la faena les dedicó un emotivo brindis que hizo llorar a la benjamina de la familia.

Alba estuvo muy pendiente de su hermana pequeña, con la que pasó una jornada muy divertida. Además de acudir a la plaza de toros, grabaron tiktoks bailando y presumiendo de su buena relación. "No la puedo querer más. Cómo está de mayor", escribió la hermana mayor en las redes sociales.
También hubo tiempo para visitar la aldea de El Rocío, una de las tradiciones familiares favoritas. "Es la primera vez que Triana viene a El Rocío y ve a la Virgen. Dice que nunca había sentido algo parecido, se le han caído hasta las lágrimas. La he mirado y ha sido algo tan mágico... Me ha hecho tan feliz que la primera vez haya sido conmigo... No os podéis imaginar", escribió en su perfil de Instagram sobre su hermana.
Las apariciones públicas de Triana Díaz son cada vez más frecuentes. El pasado mes de febrero no dudó en acompañar a sus padres a la ceremonia de entrega de distinciones de hijos predilectos y medallas de Andalucía, donde su abuelo Manuel Benítez recibió la Medalla de la Proyección de Andalucía.
Tras la reconciliación de su padre y su abuelo, el encuentro fue de lo más emotivo. "Hubo un momento que decidimos que también era el momento de que les conociera. Le enseñé a mi padre fotos de los tres, les hablaba de ellos y ya había oído hablar de ellos", aseguró Manuel Díaz. La imagen más bonita que recuerda es la del abrazo del abuelo con sus nietos. "Estaban los cuatro abrazados, le cogí la cara y me pegué el privilegio de decirle lo que quería: ‘¿sabes por qué ellos te quieren? Porque yo les he enseñado a quererte’", relató entonces sobre sus hijos Alba, Manuel y Triana.