
La crónica rosa de Es la mañana de Federico contó con Isabel González, Beatriz Cortázar y Carlos Pérez Gimeno para abordar todos los temas relacionados con la actualidad social del momento. Incluyendo el paradero en España de Paloma Cuevas, que este fin de semana acudió a la boda coral de su amiga, la joyera Cristina Yanes, y su amigo el empresario hotelero José Luis Santos.
Un gran evento con motivo de los 35 años de matrimonio de la pareja y que tuvo lugar en uno de los hoteles de la cadena Santos en Barcelona. Además de Paloma Cuevas, otros 400 invitados que hicieron lo posible por vestir prendas de color coral -las mujeres, casi todas de Rosa Clará- en una fiesta que fue decorada por el especialista Ramiro Jofre.
Tal y como desveló Beatriz Cortázar, en esta celebración -que incluyó fiesta nocturna y al día siguiente, misa de boda- Luis Miguel "no estaba ni se le esperaba" por estar centrado en su gran gira internacional al otro lado del Atlántico. Eso sí, en la fiesta "todo el mundo quería estar con paloma, la felicitaron".

"Ella estaba feliz y no se habló de Luis Miguel. Paloma es muy discreta y evita cualquier indiscreción. Sobre todo por la campaña contra ellos que se avecina para noviembre en Mexico. Ya nos están llegando misivas preparando el terreno para hacer polémica, pero ella quiere no dar ningún titular".
"Hubo muchos bailes en la fiesta, hasta ochenta amigas hicieron una coreografía en un karaoke gigante con pantallón. Una exaltación de la amistad. Han hecho una peña de lealtad donde también estaba Lydia Bosch y su hija, Andy, monísima", explicó Cortázar en esRadio.