Las fotos que todo el mundo decía conocer y nadie había visto salieron a la luz por fin ayer después de tres décadas ocultas.
Federico Jiménez Losantos ha afirmado que el miedo que podía tener Bárbara Rey cuando entran en su casa, estaba más que justificado. Ha recordado cuando la propia Bárbara llamó a la cadena COPE porque quería hablar con Antonio Herrero porque la habían intentado matar manipulando los frenos de su coche. Antonio Herrero contó que aquel intento de quitarla de enmedio olía a CESID. Fue Juan Alberto Perote, jefe de la unidad operativa del CESID, quién habló con Jiménez Losantos confirmando que fue él quien entró en la casa de Bárbara. Como ha recordado el director de Es la Mañana, el caos y la corrupción en España era tal, que Bárbara tenía razones para tener miedo.
Aunque el rumor ha estado ahí durante mucho tiempo, es cuando sale la serie de TV de Bárbara cuando se habla sin tapujos de la relación con el rey Juan Carlos. Ayer pudimos ver las imágenes de un secreto a voces que ya no lo es ya que Ángel Cristo Jr ha vendido estas fotos para vengarse de su madre asumiendo el papel de Oliver Twist, en una guerra mediática auspiciada por una cadena y una productora que le está pagando para seguir hablando de todo este asunto.
Bárbara ya ha tomado acciones legales y según nuestros colaboradores, es lo mejor que puede hacer ya que, si a estas alturas no ha visto cómo es realmente su hijo, llevarle a los tribunales es la única opción porque no tiene remedio.
Sobre la entrevista póstuma a Julián Muñoz, de la que podemos decir que es más de lo mismo y sin hacer autocrítica, nos podemos quedar con dos momentos, cuando sugiere que todo el dinero que robó se lo gastó en Isabel Pantoja (comentando incluso que la relación le costó 90 millones) o cuando Pepi Valladares contó que la ruptura de Isabel Pantoja y Julián Muñoz vino porque Julián le fue infiel con Dulce, la niñera de Chabelita.
La gira de Luis Miguel se convierte en la más taquillera de todos los tiempos de un artista latino, que ha superado a otros artistas como Bad Bunny o Karol G. Según Billboard Boxscore, el cantante ha vendido 2,2 millones de entradas en sus 146 conciertos, y ha recaudado 284 millones de euros, veinte de ellos en España.