
Tras un paso por Bailando con las estrellas con polémicas y acusaciones de tongo incluidas, Anabel Pantoja ha optado por poner distancia y desconectar unos días junto a su pareja, David Rodríguez, y su hija. El destino elegido: Ámsterdam, ciudad en la que la influencer está encontrando algo de paz después de semanas de algunos encontronazos en redes sociales.
La familia al completo aterrizó a primera hora del sábado para aprovechar el puente de la Constitución, y Anabel no tardó en compartir con sus seguidores cómo se siente en esta escapada familiar: "Solo los 3 me sobra todo", escribió nada más llegar, dejando claro que necesitaba este pequeño descanso rodeada de los suyos.
A través de sus redes sociales ha ido publicado algunas de las cosas que más le han llamado la atención de la capital neerlandesa, ya vestida de Navidad, como las peculiares viviendas junto a los canales: "Me da mucha curiosidad ver las casas, cómo vive la gente aquí. Si hay alguna persona española que me quiera abrir las puertas de su casa aquí en Ámsterdam… Solo por ver cómo es todo. Me encantaría. Sería como 'Españoles por el mundo', pero como 'Anabel en Ámsterdam'".
En sus publicaciones del fin de semana hemos podido ver cada rincón y paseo de la familia, aunque no sin alguna "confusión". En uno de sus stories publicó que estaba en Amsterdam con la bandera de Francia. Un error que muchos seguidores no pasaron por alto. Ante la avalancha de mensajes, la propia Anabel salió al paso con un vídeo explicando "la confusión": "Estoy guardando mi viaje a Ámsterdam (en las publicaciones destacadas de su Instagram) y siempre pongo la banderita de cada país y puse la de Francia. Pido disculpas. La verdad, no me sé los colores de las banderas. ¿Ustedes os sabéis todas las banderas de todos los países? Aparte de la vuestra y de la de Estados Unidos y la de brasil que son las más conocidas. Pues yo no".
En cuanto a qué se puede deber su error, "la culpa" fue de la oscuridad: "David me dijo, azul, blanco y rojo, y lo hice por la noche. Así que nada... Soy un desastre, pero, haceros una pregunta, ¿os sabéis vosotros las banderas? ¿A qué no?".
Todo ello mientras intenta reponerse del desgaste de las últimas semanas. No solo por la exigencia física del concurso, sino también por el revuelo generado por las diferencias entre los votos del jurado y del público, que la llevaron a defenderse públicamente: "La gente que considera que estoy aquí por tongo o por ser 'sobrina de' y porque me han puesto aquí por el Ayuntamiento de Villaviciosa de Odón. Pues no sé, que se tomen una tila o algo" Comentaba la infleuncer.
Desde su perspectiva, no siempre tiene que ganar la "persona perfecta", "Al final, yo creo que todo el mundo merece una oportunidad en la vida y no tiene siempre por qué ganar la persona perfecta, con medidas perfectas, con disciplina perfecta y con una danza perfecta. También tiene que ser una persona de a pie que no ha visto un porté en su vida, que no entrena y que empieza de cero".
A pesar del frío y de todas las polémicas de los últimos días, la influencer aseguraba que esta escapada le ha sentando de maravilla: "No sé ni cómo estoy en pie", confesaba mientras compartía una cena tradicional en uno de sus stories, poniendo fin a un viaje de tres polémico pero "necesario".
