Este domingo Kiko Rivera sorprendía a todos con su decisión de irse de la casa de Gran Hermano. Por eso, se esperaba que se presentara en el plató del Debate de Gran Hermano VIP para hablar de los motivos del abandono. Y eso hizo. El hijo de Isabel Pantoja aseguró que estaba cansado de todos los compañeros de la casa y que había una notable falta de convivencia.
Por lo visto, el ambiente que se respiraba en la casa era insufrible: cotilleos, grupitos y malas intenciones. Además, en su última prueba en la casa le tocó convivir con su enemiga número uno, Laura Cuevas, algo que, sumado a la presión que ya tenía, le ha hecho dejar la casa de Guadalix. "Me he ido porque no me sentía querido y ahora necesito cariño", aseguró durante el programa.
También explicó que le pudo el no haberse podido despedir como a él le hubiera gustado de su madre, algo que le iba agobiando cada día más. También quiso disculparse con Olvido Hormigos por su mal comportamiento en el concurso y aprovechó para hablar de todos sus compañeros.
Como era de esperar, de Laura Cuevas opinó que le daba pena que solo pueda "hablar de la familia Pantoja" porque no tiene nada más. Además, desveló que se había acostado con todos sus amigos.
También tuvo palabras para Belén Esteban y Víctor Sandoval. Con la princesa del pueblo comenzó llevándose muy bien pero acabaron siendo rivales, luchando por ser el más fuerte. "Belén, no quiero volver a verte en un concierto de mi madre, ni lamiéndole el culo, ni pidiéndole que se haga una foto contigo. Y a ti, Víctor, te digo una cosa, yo tengo una familia que me quiere. Tú solo tienes un perro", sentenció Kiko.
Como era de esperar, le preguntaron por su supuesta infidelidad con Lorena la noche antes de entrar en el reality. Ésta se sentó en el programa de Sálvame Deluxe para contar todas las intimidades del DJ. "Eso es algo que yo ya he hablado con mi pareja y que solo le interesa a ella. Con todos mis respetos, aquí estamos para hablar de Gran Hermano VIP", dijo, y no volvió a hablar de este asunto.