El plató de Sálvame Deluxe esperaba la visita de María Matamoros, sobrina de Kiko Matamoros, de la que se esperaba que hablara con total sinceridad sobre la supuesta infidelidad de Makoke que presenció en una conocida discoteca de Ibiza. Sin embargo, en un cambio de última hora, el programa contó con la presencia de otro Matamoros, en esta ocasión Diego, hijo del colaborador del programa.
El hijo más crítico del tertuliano habló en un momento sensible para su padre. Poco antes, en la edición de la tarde, Kiko Matamoros protagonizaba un desagradable episodio en plató después de que sus compañeros le echaran en cara no haber cuidado a su hija Irene y que Laura le tenga que donar el premio a su hermana pequeña para que pueda matricularse en la universidad.
María Patiño fue la más dura: "Estoy cansada del victimismo de Kiko Matamoros. Cada vez me gusta más Laura", a lo que su compañero respondió muy molesto: "Celebro este acto de demagogia sucio de mi compañera". Después de un tenso enfrentamiento y al verse sin apoyos, Kiko se levantó de su silla y abandonó el plató dando una patada en la puerta al salir.
Jorge Javier Vázquez le preguntó a Diego sobre este momento y él, dejando de lado las fuertes críticas a las que nos tiene acostumbrados, se mantuvo prudente. "Mi padre ha llegado una situación límite en la que tiene que replantearse las cosas. Me ha dado pena verle tan abatido esta tarde", contó mientras aconsejaba a su padre pensar más "en la salud".
¿Reconciliación a la vista?
Ahora que Laura ha salido de GH VIP, le espera asimilar la tormenta mediática que ha sufrido -y buscado- su familia durante su estancia en la casa. "Aunque Gran Hermano haya terminado, creo que lo peor para mi familia está por llegar, porque a poco que Laura hable en una entrevista…", vaticinó Diego Matamoros que, a pesar de todo, estuvo muy cordial con su padre, sorprendiendo con sus declaraciones: "Si a mi padre el día de mañana le pasa algo grave, yo voy a estar ahí".
Diego contó también cómo fue el reencuentro entre Laura y Kiko después de que se proclamara ganadora: "No hubo abrazos y besos como la gente se piensa. Hubo reproches de Javier Tudela y de Makoke. Terminaron en un abrazo, eso sí". Él afirmó que nunca pondría a su hermana en la situación de elegir entre él y su padre, por muy mal que se lleve con Kiko. Ahora que Laura está fuera, sus primeras declaraciones son de lo más esperado.