Se llama Julia Slonska y es muy popular entre los jóvenes polacos gracias a su perfil de Instagram, pero su última gamberrada para ganar seguidores y likes le ha salido muy cara. La joven se grabó dando martillazos a una estatua de 200 años de antigüedad hasta que consiguió romperle la nariz, todo entre sus carcajadas y las de quienes la acompañaban. Después subió el vídeo a sus stories de Instagram y ya ha dado la vuelta al mundo, generando críticas e indignación.
El revuelo ha sido tal que su futuro como influencer pende de un hilo. mBank, el cuarto banco más importante de Polonia y el primero online, ha decidido cancelar de manera fulminante con Julia por su comportamiento lamentable retirando el anuncio de internet y televisión en el que aparecía. También su agencia de modelos, Specto Models, ha rescindido su contrato. Pero eso no es todo, también tendrá que rendir cuentas ante la ley. Su vandalismo puede ser castigado con una pena de prisión de entre seis y ocho meses.
Ante el revuelo, la modelo pidió perdón y se excusó en que había bebido antes de realizar su acción. "No debió haber ocurrido. Lo lamento. No diré lo que me impulsó a hacerlo porque es un asunto privado, pero quería disculparme con todos". Además reconoció que fue ella misma quien alertó a las autoridades de lo que acababa de hacer.