Resulta sobradamente conocida la importancia de que un producto luzca denominación de origen, y más aún si es de Guijuelo. Pero incluso dentro de la categoría, existen productos más conocidos que otros, lo que en ocasiones genera olvidos injustos.
Es el caso del codillo, un producto ibérico absolutamente delicioso para todos los que han podido acceder a él. Nosotros, en efecto, hemos decidido otorgarle hoy el protagonismo merecido.
Estamos ante un manjar delicioso, nacido del despiece del cerdo ibérico y, en concreto, a la parte central de las extremidades. Se trata del unión de los dos huesos de la pata donde se forma el codo o la rodilla, una pieza con todo el sabor del cerdo ibérico y también su peculiar aroma. Y por tanto, una sección perfectamente capaz de aportar su granito de arena al mundo gastronómico de nuestro país.
Su cocción, eso sí, requiere bastante tiempo, en ocasiones incluso horas. Ello se debe a la importante cantidad de nervios que se concentran en esa zona. No obstante, hay recetas que permiten saltarse la espera y saltar más rápidamente al plato.
El codillo recompensa al comensal con multitud de propiedades alimenticias. Su gelatina y colágeno viene bien para nuestras articulaciones, la fibra y cartílago ayudan a proteger nuestras propias zonas de desgaste.
En definitiva, el codillo ibérico es otra forma más de disfrutar de lo ibérico y de valorar cada una de las partes de este animal que tanto aporta al mundo del mantel de pata negra.
Así que ahora solo os queda disfrutar de una parte más del cerdo ibérico entrando a nuestra tienda online Guijuelo Directo.